Yona Friedman es un arquitecto húngaro-francés nacido en 1923 en Budapest. Su auge se remonta hacia la época de los 50s y 60s, en la llamada era de las megaestructuras. En su primer manifiesto llamado La Arquitectura Móvil, su propuesta ideológica de la “ville spatiale” se unió a conceptos como movilidad, redes, tecnología, movimiento social y el rol del arquitecto como constructor.
Yona Friedman Architecture without building es el nombre de la exposición que actualmente se muestra en el Ludwig Museum de Budapest, la cual presenta dibujos, maquetas e ilustraciones del arquitecto las que representan en distintas escalas la virtualidad de la arquitectura actual.
En los 60s, un grupo de arquitectos produjo una seria de proyectos basados en el crecimiento urbano y producción de la maquinaria en ciudades ideales. Friedman fue uno de ellos, representando ciudades utópicas, invisibles, que se desdoblan, que marcan ritmos y estructuras, que buscan dentro de toda irracionalidad dar espacio a un postulado fuerte y claro.
Friedman, dedicado al estudio integral de la arquitectura, la utilización de los materiales del lugar, las tecnologías simples y edificios dirigidos a los usuarios y no los arquitectos; todo dentro de la sustentabilidad y variabilidad. una serie de propuestas que van desde lo racional a lo imaginables destacan principalmente por el discurso que existe tras ellas; el compromiso social y la sustentabilidad.
Para Friedman, la arquitectura no es simplemente el arte de construir, si no el de manejar un espacio determinado. Remarca nuestro frenesí por la construcción la cual no necesariamente cumple sus objetivos de dar cobijo a todos los habitantes del planeta.
Vía Arquine