La Primavera Árabe desafió la idea de un público árabe monolítico, revelando en cambio, muchos “públicos” de grano fino. El público de la Primavera Árabe es una multiplicidad. Proponer un espacio público entre los complejos tejidos urbanos de Manama es llegar a un acuerdo con esta multiplicidad de “públicos” dentro de la ciudad, adaptándose a su diversidad y perspectivas. A continuación la propuesta de SO - IL, “Urban Fabrics”, un espacio público que se destaca por el uso de rampas y telas de colores.
Tradicionalmente, la ciudad árabe típica se ha desarrollado sin grandes espacios públicos, y se resistió a las nociones simbólicas en las típicas ciudades occidentales. En este sentido nos imaginamos una nueva plaza pública de Bahrein que prioriza la interactividad lúdica, la improvisación y adaptabilidad. En vez de tener un espacio único y estático, este lugar se acomoda para la diversidad y la contradicción.
Construido de telas translúcidas que se mueven suavemente, brillando con colores cambiantes a través de capas de diferente densidad, el campo dinámico se adapta a la escala y a la densidad de la ciudad para un evento público. Los visitantes caminan fácilmente entre los paneles de un espacio a otro, dando testimonio de la diversidad de la vida de la ciudad.
El entorno inventa nuevas formas de interactuar en un espacio compartido: escuchando un concierto improvisado, visitando el mercado diario, en el silencio de la lectura, deportes, reunirse con amigos, celebrando el cumpleaños de un niño o bien tomando un descanso para comer a la sombra. La nueva plaza de Bahrein es a la vez grande e íntima.
Vía: afasia
