Descripción enviada por el equipo del proyecto. Salas muy estrechas y mal iluminadas, muros enmohecidos y pisos de madera retorcidos por la humedad del suelo; este fue el escenario que presentaba el departamento a primera vista. El encargo era generar un lugar fresco y acogedor, espacioso y bien iluminado. La idea principal de los arquitectos fue integrar la sala con la cocina y los dos jardines más pequeños que antes estaban cerrados por una cubierta de metal. Esto hizo que el departamento respire y se mantenga iluminado.
El área del tercer dormitorio y los dos baños de visitas se incorporaron a la sala, creando una proporción más adecuada para la organizacion de los muebles. Durante la demolición se descubireron dos pilares que pasaron a ser los protagonistas de la historia, para servir como apoyo a la nueva mesa de comedor.
Los espacios se superponen y se entrelazan como los muebles, que sirven para guardar los platos, bajo la encimera de la cocina, o para poner reproductor de DVD y televisión por cable, cuando se acerca al sofá. La cocina se resalta con baldosa hidráulica de piso a techo, y se ubica en el centro del departamento, posibilitando juntas y reuniones em este sector.
La iluminación, una de las principales preocupaciones de los clientes, se logro mediante la apertura de dos jardines que estaban cerrados y sustituyendo los correamientos por grandes paneles de vidrio totalmente transparente.