Descripción enviada por el equipo del proyecto. Esta semana, en nuestra sección En Detalle, les presentamos el nuevo edificio central de la empresa Pratic, recientemente inaugurado en la ciudad de Fagagna, al norte de Italia. El complejo ubicado a un lado de una carretera provincial, fue diseñado y construido por los arquitectos Stefano Gri y Piero Zucchi de Geza.
El edificio se caracteriza por un cuidado diseño interior y exterior, muy expresivo a través de sus materiales y elementos de arquitectura. A continuación les mostramos detalles constructivos de las fachadas estriadas y de una gran viga en voladizo que cumple un papel fundamental en la eficiencia energética del proyecto.
La intervención se compone de un volumen principal, un paralelepípedo con una superficie de aproximadamente 10.000 m2 que alberga el núcleo productivo principal y un segundo volumen de oficinas de aproximadamente 1000 m2 (dispuesto junto al primero pero girado en 15 grados con el fin de alinearse con la carretera).
Además incluye un estacionamiento para 100 autos; un muelle de carga y un área de servicio de aproximadamente 2.700 m2, además del jardín que cuenta con unos 33.000 m2.
Los espacios diseñados para las áreas de comunicación, salas de exposiciones, salas de descanso y zonas comunes abiertas y privadas se encuentran también en los edificios para dar cabida a las actividades diarias de los trabajadores. El complejo, anclado en la zona industrial de la ciudad, está ligado íntimamente al paisaje agrícola circundante a través de los diferentes aspectos de su diseño.
Simples cuerpos oscuros
El proyecto está impregnado de un fuerte deseo de simplicidad. La naturaleza seca y elemental de la estructura, los colores e incluso la interacción con el paisaje son testimonio de este principio. Independientemente de su naturaleza oscura y silenciosa, el complejo se las arregla para convertirse en un icono para el transeúnte. El volumen de las oficinas de la vivienda se convierte en un signo sorprendente incluso para los que conducen por la autopista, que busca establecer un diálogo entre los conceptos de la inmovilización y el movimiento.
Con una verticalidad más pronunciada, el núcleo de producción se caracteriza por una fachada estriada dominado por la alternancia de superficies acristaladas y paneles sólidos de diversos anchos que son siempre de diez metros de altura. Las diferentes dimensiones de la piedra de mármol negro y el cemento oscuro que conforman el acabado de los paneles, permiten una fachada variada y vibrante a través de la interacción de la luz del sol, la sombra y el cambio de las condiciones atmosféricas.
Viga en Voladizo
El núcleo de la oficina está protegido en el lado sur por una viga de hormigón oscuro de grandes dimensiones (aproximadamente 80 metros de longitud) que pone en relieve - en una escala mayor - la horizontalidad de ciertos elementos del proyecto. La viga, paralela al suelo, se proyecta más allá del perímetro del edificio como para indicar una confrontación entre sí y el paisaje. Su reflexión sobre la fachada acristalada genera una gran "sombra flotante" que cumple una función climática al controlar la temperatura en los espacios de trabajo.
Tres Naturalezas
La organización de los programas alojados en el edificio tienden a establecer una relación no jerárquica entre los espacios, para lograr una mayor calidad de la integración entre los entornos construidos. Esta simplicidad, incluso puede ser entendida en términos de interacción del proyecto con el contexto circundante, el cual fue diseñado cuidadosamente por Geza a través de tres gestos: el terreno de cultivo, el jardín y el patio.
El terreno cultivado se abre hacia los frentes sur y oeste del complejo, fusionándose con el paisaje. Los dos edificios principales se despliegan en torno al jardín, un área semi-privada que une el núcleo de producción con la zona de administración. Un roble plantado en medio del patio, define el último elemento natural del diseño, generando una relación más íntima entre la naturaleza y el hombre.
El patio enriquece los espacios interiores, al actuar como una extensión del paisaje circundante que supera el sentimiento de la interioridad de las oficinas. La zona reservada para vehículos se encuentra dentro de un perímetro circular, ligeramente enterrado en lo que respecta a la carretera con el fin de amortiguar el impacto visual que esta tiene en el proyecto.
Sustentabilidad
El enfoque del diseño se desarrolla también en términos de sostenibilidad ambiental. El techo de la central de producción se compone de una serie de paneles fotovoltaicos que cubren una superficie aproximada de 2.300 m2, los que generan una mayor cantidad de energía de la necesaria para el funcionamiento del edificio. Pratic es totalmente autosuficiente, por eso obtuvo la certificación "classe A" (equivalente al platino de LEED). La tecnología fotovoltaica se esconde de la vista a través de la arquitectura.
Sobre la base de varios estudios relativos a la salud general de los espacios interiores y las tácticas de ahorro de energía, se desarrollaron pantallas solares integradas en la arquitectura de las oficinas y el núcleo de producción. En este contexto, la "sombra flotante", además de definir el carácter del edificio, es un elemento indispensable para el control climático ya que soporta las pantallas y modula la mayor parte de la luz directa del sol en las oficinas a lo largo de las estaciones.