- Área: 883 m²
- Año: 2011
-
Fotografías:Prudencio Torres Padilla
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La edificación se ubica entre las calles Venegas, Alonso Alvarado y Murga, dentro del municipio de Las Palmas de Gran Canaria, en las Islas Canarias, España.
El solar de forma trapezoidal tiene una superficie de 91,13 m², con una dimensión media de 16,23 m en sentido longitudinal y en el transversal, los extremos son 7,90 m y 3,35 m respectivamente.
Linda en el lado sur con una edificación antigua de cuatro plantas de altura. El nivel freático se encuentra muy próximo a la superficie, estando tan solo a 2,40 m.
De acuerdo con las directrices y el programa solicitado, se proyectó este edificio de siete plantas de altura, compuesto por seis plantas de oficina y un local comercial con sótano.
La zona demandaba una respuesta arquitectónica diferenciada, con un perfil representativo a fin de potenciar esta área administrativa. Además, el edificio debía ser reconocido como un nuevo elemento de referencia en la ciudad.
Por las dimensiones y características particulares de la parcela, se ubicó el núcleo de comunicaciones (escalera protegida y ascensor) junto a la medianera. El distribuidor y los servicios (dos aseos en cada planta), se agruparon de manera que el resto del espacio de la oficina fuera diáfano y se orientara a la plaza pública.
La propuesta de fachada en cada calle, unificándose por un lado a través de una directriz curva con las calles de Venegas y Murga, determinó la solución acristalada y abierta. Por otro lado, en relación a la tercera calle de Alonso Alvarado, la fachada se proyectó más cerrada por sus condicionantes urbanos, incorporando la repetición de ventanas que se observa en los edificios de esta calle, para después “diluirse” mediante un hueco alargado hasta finalizar con el encuentro acristalado de la esquina.
Para la terminación de las distintas fachadas, se optó por instalar un único revestimiento, proporcionando con ello un carácter neutro y de unidad en la edificación.
La cara naciente se protege del soleamiento por medio de una celosía del mismo material cerámico que el resto, a modo de parasol o “brise soleil”. En cambio, la fachada poniente se cierra casi en su totalidad y se disponen a lo largo de la misma, numerosos armarios para los archivos de las oficinas.
El local comercial, consta de una planta diáfana, junto con un sótano de almacenamiento y dos aseos. Aquí las fachadas se han resuelto como un cuerpo único, acristalado y sin carpintería, que sobresale de la alineación oficial lo máximo permitido por la ordenanza municipal para destacarse como cuerpo independiente, potenciando esta particularidad la curvatura del dintel en la esquina que se retranquea del plano de fachada.
Por último, cabe comentar que en el supuesto de que una sola empresa se ubicase en la totalidad del edificio, la función de este local sería de vestíbulo, control, recepción, atención al público, etc.