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Arquitectos: Frederico Valsassina Arquitectos
- Área: 250 m²
- Año: 2004
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Fotografías:Patrick Monteiro
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este es un proyecto de casa de verano que nació como resultado de una serie de condiciones precisas en términos de programa: una sala de estar grande, una zona de oficinas, un área de servicio, un área privada con dos dormitorios pequeños y una suite con sauna, un garage con un taller incorporado y una piscina, a través de espacios bien iluminados y abiertos hacia el paisaje.
El resultado es una casa singular: un volumen regular y compacto, marcado por grandes aberturas hacia el sur y pequeñas aberturas hacia el norte, enfrentando una caja de cristal y una caja de hormigón pintado de blanco. Aprovechando la ligera pendiente en el lado oeste de la parcela, el salón se abre a una terraza que se conecta a través de niveles con la piscina. La separación entre la sala de estar y los dormitorios se compone de un espacio exterior cubierto.
La casa, claramente contemporánea en su planteamiento formal, responde también con una mirada atenta y sensible a los fenómenos de la vivienda y el acto de concebir un espacio doméstico. La propuesta final busca conjugar programa, tiempo y lugar.
El programa responde totalmente a la voluntad, gustos, hábitos y experiencias revelados por el cliente. El espacio resultante se adapta a sus usuarios y no al revés.
En cuanto al tiempo, la duplicación o subdivisión de un módulo base, sin el riesgo de convertirse en una obsesión, es sutilmente contradicho por una serie de decisiones de proyecto que definen los usos domésticos y las experiencias de vida. Es la fluidez adecuada en la organización del espacio, que logra diferenciar las funciones y define los límites entre lo privado y público dentro de la casa. Las puertas y pasillos, comúnmente utilizadas en la arquitectura doméstica para circunscribir los movimientos, han sido reemplazados por un espacio T invertido que se extiende formando un patio.
La doble condición axial y convexa de este espacio limita la circulación entre las salas de estar y los dormitorios, y al mismo tiempo, amplía los campos visuales sin comprometer la intimidad de los espacios.
The double axial and convex condition of this space limits circulation between the living rooms and the bedrooms, at the same time, enlarges the visual camps without promoting indiscretions or forcing intimacy. The relations between the physical and visual continuity established between interior and exterior, achieved by the use of big glass windows on the living room and bedrooms’ level, contrast with the intimacy and opacity given to the service area and contribute to the comprehension and clarity of the space logic of this house and of its functionalities.