- Año: 2012
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Fotografías:Sebastián Crespo
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La oportunidad de repensar conceptualmente la idea de lo que es una cabaña es lo que hizo de este encargo interesante. En un terreno de 4 hectáreas y un huerto de árboles existentes tuvimos esta oportunidad.
Los clientes requerían dos cabañas para complementar su casa de fin de semana, y así poder compartir su propiedad con su extensa familia. La simplicidad tanto de la tipología como del programa nos permitió dar un enfoque más conceptual y menos funcional para desarrollar las ideas.
La principal, se basa en abstraer los elementos básicos de una vivienda que son el “TECHO” y el “PISO”, y ubicarlos en medio de los árboles que se encuentran en el terreno. Esto permite el contacto más directo y primitivo con el entorno y naturaleza.
Primero, la implantación responde a la ubicación de las cabañas entre los árboles, manteniendo cada uno de ellos, y creando así el ambiente más natural posible. Esto hace que la morfología en planta de las dos cabañas sea obligatoriamente distinta. Al mismo tiempo el vocabulario formal y las ideas constructivas son las mismas, partiendo del bosque como fondo del lienzo en el que se trabajo. Dos planos horizontales de hormigón visto (techo y piso) se insertan en el bosque donde el espacio habitable entre estos es completamente permeable al exterior mediante un envolvente amplio de vidrio.
La continuidad de los árboles es abstraída en la estructura soportante de las cabañas mediante perfiles rectangulares metálicos al natural que además de replicar la verticalidad del bosque, recrea la aleatoria implantación de los árboles y su espaciamiento. Por último, las áreas privadas de dormitorios son cubos de ladrillo que a más de definir los ambientes, responden a la construcción de la casa principal con este mismo material.
Se logra una conexión y diálogo entre el objeto construido y el entorno desde el interior hacia el exterior pero a su vez también, desde el exterior hacia el interior. Donde, las sombras y claro oscuros de la vegetación se insertan y bañan los diferentes planos que contienen el espacio edificado.
Estas sombras acentúan la materialidad de los muros de hormigón visto que delimitan el objeto arquitectónico, generando un sin número de texturas y tonalidades que van cambiando a lo largo del día.