- Área: 3965 m²
- Año: 2009
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Fotografías:José Hevia
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Proyectar un edificio de viviendas en pleno Ensanche de Barcelona 150 años después de la aplicación del Plan Cerdá obliga a extremar la reflexión sobre aquellos aspectos del proyecto que más se alejan del estereotipo del Ensanche. Entre ellos, y uno de los más relevantes, se halla la función y el cometido de la fachada, ya que la huella de los cambios en la sociedad y en su propia representación resulta, en su caso, más claramente evidente.
Adaptar la fachada a las nuevas necesidades y mantener el respeto y el diálogo con tantos años de historia ha sido la voluntad al proyectar el edificio Casp 74; utilizando un lenguaje contemporáneo que interpreta algunas de las soluciones de las fachadas prototípicas del Ensanche (idea subyacente en la normativa).
Todo ello, sin renunciar a sutiles aportaciones formales. Sirva de ejemplo, en unos casos, la levitación de la malla que compone todas las plantas piso en la fachada principal, sobre la planta baja, separada de los altillos por el acristalamiento, o su extensión hacia ambas medianeras por “desaparición” de los hastiales; y en otros, como en la fachada posterior, la idea de completar el paisaje de galerías de un interior de manzana relativamente bien conservado. En ambas fachadas se trata de reinterpretar el balcón, las persianas de librillo, las impostas y las cornisas para conseguir un edificio que se integre en el paisaje construido con un lenguaje claramente contemporáneo.
El programa del edificio consiste en 27 viviendas distribuidas en PB + 5, y dos locales comerciales con altillo dando frente a la calle Casp. La planta tipo aloja cinco viviendas de uno y dos dormitorios, y la planta superior dos viviendas de dos habitaciones y dos de una habitación, mientras que en planta baja, tres viviendas dúplex con jardín propio se distribuyen en la fachada del interior de manzana, al tiempo que dos locales dan a la calle. En plantas sótano, un aparcamiento de 2 plantas aloja 34 vehículos. La fachada a la calle se soluciona a través de unos paneles fijos formados por unas piezas especiales de gres en posición vertical enmarcadas por un fino marco de acero, así como unas persianas correderas de aluminio que dan la privacidad y el control lumínico necesario a sus grandes hojas acristaladas. La fachada del patio de la manzana se resuelve con una retícula de acero que enmarca las amplias ventanas de las viviendas. La protección solar y la privacidad se resuelven aquí con unas persianas replegables de aluminio lacado que volverán a crear una fachada cambiante y en movimiento desde el exterior.
En la cubierta del edificio se instalan captadores solares para el agua caliente sanitaria, conectados al sistema de climatización de las viviendas para reducir el consumo energético. Este hecho, combinado con la ventilación cruzada de todas las viviendas a través de unos patios interiores generosos y la protección solar pasiva que compone las fachadas, hacen que el edificio pueda funcionar con una mínima aportación de los medios activos de climatización.
