- Año: 2012
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Aunque en apariencia brutal, oscura y arrogante, el edificio de oficinas Monolit es en realidad el resultado de una cuidadosa negociación entre las preocupaciones relativas al medio ambiente urbano, el parque vecino y una serie de limitaciones funcionales. En cuanto se refiere al tejido urbano, el sitio, que se encuentra en el borde de un área protegida, se caracteriza por la existencia de dos paredes ciegas, una alineación incierta con la avenida y por la presencia de los diseños vecinos de orientación arquitectónica y cualidades discutibles. Sin embargo, el lugar ofrece la oportunidad de una inserción en una zona de alto tráfico, prestigiosa dentro de la capital.
El volumen importante de los elementos actuará como un telón de fondo neutro, transparente que tenga la mayor cantidad posible de luz y vistas al parque a través de un muro cortina que está interrumpido por elementos horizontales de toda la altura del nivel, sirviendo también en la integración de la construcción con los edificios vecinos, mientras que la tercera fachada, un nuevo invento, se anima a desprenderse de la totalidad.
La plasticidad del prisma, con sus líneas de corte limpio, hace que el monolito se destaque entre las otras piedras y preste su fuerza para imponer el orden, la estabilidad y el rigor. Esta forma refleja mejor la identidad y las aspiraciones de la empresa-cliente y crea una imagen sugestiva. Uno de los elementos clave que han apoyado la formación de esta imagen era el uso del granito negro - un mineral natural, precioso que pone de relieve el grado de solidez, con el negro, en este caso, contribuyendo incluso al nivel conceptual de la solución de arquitectura. Concebido según la retórica de los procesos naturales y de convertirse con el tiempo, se generan líneas de ventanas, como grietas en la roca, y se colocan cuidadosamente en relación con el espacio interior para que desde el interior creen recortes en el paisaje - una forma diferente cuando te sientas en tu escritorio.
En el quinto piso, el volumen principal, transparente retrocede desde el prisma negro, lo que le permite volar libremente y crear terrazas desde donde la mirada puede llegar más allá de las cimas de los árboles del parque y disfrutar de toda la parte norte de la ciudad, mientras que la zona verde desalojado por el edificio se encuentra y se traduce en una escala vertical en parches de color verde terrados en los dos niveles superiores.
En la zona de recepción, uno se encuentra con los mismos colores neutros y líneas oblicuas, mientras que el granito se sustituye con pizarra natural negra, y la recepción junto con porciones de la pared, techo y el suelo, forman un portal de luz. La pureza de la idea arquitectónica y la forma de este objeto, su claridad y proporciones, su adaptación precisa a su contexto de generación, todos estos son argumentos a favor de que menos es más. En este sentido, el resultado previsto para alcanzar la calidad artística y conceptual, sin renunciar totalmente a su contexto. Monolit parece expresar el deseo de ser visto como estando en armonía con el territorio, de convertirse en un punto de respiro, un punto negro que realiza la búsqueda del silencio en medio del ruido de la ciudad.
