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Arquitectos: Ami Shinar – Amir Mann
- Año: 2013
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Fotografías:Dana Polo
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El concepto básico detrás del edificio Z Design, situado junto al Museo de Diseño Holon (por Ron Arad), es la expresión de la residencia básica "agregada" - el departamento, casi como una unidad independiente. Esta articulación es simplemente logrado al hacer que cada "caja" de dos pisos (que contiene cuatro departamentos) gire alrededor del núcleo del edificio en relación con los dos pisos de arriba o de abajo. Así también cada segundo departamento gana una "azotea" de 30 metros cuadrados, un elemento integral de la masa del edificio.
La rica composición volumétrica de todo el edificio casi consigue ser un subproducto de ese simple cambio. También se gana otra característica: no más fachadas "principales" y "secundarias"; cada lado del edificio es igualmente importante.
Por supuesto, este diseño tal vez es una renovación de viejas ideas bastante olvidadas como Safdie's 1967 Habitat en Montreal, Cápsula Torre Nakagin de Kisho Kurokawa en Tokio (1972) y uno menos conocido "Edificio Patio" en Beer-Sheva, Israel, por Lufenfeld-Gamerman, del año 1965. Sin embargo la mayoría de estos experimentos pioneros han desaparecido de alguna manera.
Este edificio con su geometría "giratoria" reproduce este viejo-nuevo vocabulario, mientras que es construido de forma sencilla y económica, a través de un esqueleto de hormigón con muros convencionales prefabricados in situ. En edificio de 30 o 40 pisos de alto podrá ser igual de bien implementado : podemos imaginar una manzana entera diseñada de acuerdo con edificios de poca altura que rodean la calle en medio de algunos más altos, alrededor de un pequeño espacio abierto al público.
Las terminaciones exteriores son bastante básicas, siendo principalmente de piedra blanca, integrada en las unidades de muro. Los planos empotradas están revestidos de granito gris, mientras que las pequeñas áreas entre las ventanas y los balcones están revestidos en aluminio. Podemos decir que la belleza del edificio miente en su lógica de formación volumétrica, con sus caras terminadas con materiales de manera casi independiente.