- Año: 2010
La vivienda está situada en una amplia propiedad situada en Comporta, Portugal. El terreno se presenta completamente limpio, apenas definido por un suelo arenoso dotado de una vegetación espontánea y fuertemente marcada por líneas verticales de numerosos pinos.
En este contexto, el objetivo primordial del arquitecto Rui Pinto Gonçalves - RRJ Arquitectos fue diseñar una pieza que se encuadrada perfectamente al lugar. Registrar el apisaje en un gesto sin ser destacado. Fundir el objeto arquitectónico con un perfil de naturaleza existente.
Siguiendo estos supuestos, el proceso conceptual resultó ser una composición de dos cajas, ligadas entre sí por un volumen menor. Dos cajas fundidas, que dejan el exterior circular por el interior y que se diluyen en sí mismo.
El conjunto se establece en el suelo, como si esto fuese parte, horizontal y mimético, por la escala, materiales y colores, en partes de rigor geométrico, ventanas que se abren para el propio escenario y que simultáneamente difunden perspectivas de sí mismo en sus reflejos.
Un lenguaje contemporáneo marca toda la existencia del edificio, diseñado por líneas puras y por juegos minimalistas de planos y materiales.
Los volúmenes principales son dos paralelepípedos de hormigón a la cista, fudnamentalmente delimitados por un marco griz mínimo. El volumen que los une es revestido con paneles de Viroc Negro (panel de cemento y fibras de madera), con expresión bastante neutral.
Una de las grandes preocupaciones en el concepto del proyecto fue la protección solar, la intención de hacer la casa lo más permeable posible, fundiendo espacios interiores con los exteriores, originando grandes planos acristalados obligatoriamente protegidos de la incidencia de la luz solar. A sí mismo, todos los planos de vidrio son recaudados y poseen pantallas de sombreado.
Los interiores procuran seguir la misma línea de coherencia, destacándose un ambiente puro y despojado, donde predominan las transparencias y los materiales nobles.
Se valorizan los planos blancos, que revisten casi todo el interior, sobre un pavimento de madera natural.
Acompañando la filosofía de los arquitectos de RRJ, la construcción responde a las características del lugar, punto de partida para la creación de soluciones que no se repiten.