Por Arq. Mara Carmignani. Profesora Asistente Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño, Universidad Nacional del Córdoba.
Localización
En la ciudad argentina y mediterránea de Córdoba, sobre la margen norte del Río Suquía y muy cercano al centro histórico, se erige el complejo residencial en altura, conocido como “Torres de Junior”, uno de los más singulares de la capital. Su particular inserción en el territorio, la equilibrada relación alcanzada entre unidad y conjunto y, principalmente, el aporte cualitativo que el mismo realiza al espacio público colectivo lo transforman en un lugar reconocible con identidad propia, independiente de la escala urbana.
Programa
Emplazado en Barrio Junior, uno de los más tradicionales de la ciudad, el conjunto se define como un complejo autosuficiente que se organiza a partir de cinco torres exentas y algunos bloques bajos en tiras, vinculados todos a través de espacios verdes. El mismo alberga 444 viviendas, infraestructura y equipamiento comercial y educativo: calles vehiculares, vehiculares de uso restringido, peatonales, veredas municipales, juegos para niños, forestación, equipamiento y escuela secundaria. Estas premisas remiten, claramente, al Team X - grupo de jóvenes arquitectos- que propone una respuesta alternativa a planteos arquitectónicos y urbanísticos propios de los CIAM, desde un enfoque socio-cultural y definiendo soluciones particulares para cada caso, con cierto grado de flexibilidad. Cuenta también con servicios de agua potable, red colectora sanitaria, red distribuidora de energía eléctrica, red de alumbrado público y de gas.
Materialidad
A cargo del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), la obra comienza a construirse en agosto de 1983 y finaliza en febrero del ´86 -aunque se habilita recién en 1989- . Se materializa mediante unsistema constructivo tradicional de muy buena calidad, donde la estructura independiente de hormigón, el ladrillo común a la vista, la piedra bola y la carpintería de chapa definen la estética exterior y refuerzan, al mismo tiempo, la idea de conjunto y de individualidad.
Tipología
Cada torre, de once niveles y con vistas hacia las distintas orientaciones por su condición de exenta, funciona de manera independiente, con su propio ingreso peatonal y alberga diversas tipologías de vivienda –monoambientes, departamentos de uno, dos y tres dormitorios- según la jerarquía de cada una. Ésta se manifiesta en el color singular de las carpinterías metálicas exteriores y está definida por la calidad de las terminaciones interiores.
El hall distribuidor, en planta baja y de escala reducida, contiene las circulaciones verticales y el acceso a subsuelo donde se localizan las cisternas, los medidores y las antiguas compactadoras de residuos, ya en desuso. Cada nivel cuenta con ocho departamentos de dimensiones variadas que superan las superficies mínimas propias del Movimiento Moderno y responden de manera más adecuada a la diversidad de gustos y situaciones de cada usuario. Son claramente más cómodos y amplios que los que se construyen en la actualidad en nuestro medio. Para la ejecución de los tabiques interiores se utilizaron ladrillos cerámicos huecos y mampostería compuesta – tabique de ladrillo cerámico hueco y común a la vista- en los muros exteriores, fortaleciendo, de esta manera, la imagen de ciudad ladrillera que caracteriza a Córdoba.
Las terrazas son accesibles y proponen vistas panorámicas sumamente interesantes. El conjunto no cuenta con cocheras y aunque todas las torres han sufrido intervenciones y modificaciones posteriores, llevadas a cabo por cada consorcio, pareciera que ninguna ha alterado radicalmente su esencia.
Espacio público
Calles con acceso vehicular restringido, plazas de distinto carácter, incorporación adecuada del verde y equipamientos complementarios, mantenidos en excelente estado gracias a gestiones eficientes, generan un microclima realmente singular en el complejo residencial que posibilita el paseo y el encuentro, a pesar de su cercanía al centro de la ciudad y al ruido constante. Niños en bicicleta y jugando en las calles, adolescentes reunidos en grupos, adultos conversando o paseando a sus mascotas se apropian del espacio público otorgándole sentido a la expresión colectiva y a la diversidad social y cultural. La arquitectura, por momentos, parece diluirse gracias al protagonismo del espacio público que define, al fin, la calidad proyectual y ambiental de este conjunto residencial.
El derecho a sentirse orgullosos del lugar en el que se vive y a ser reconocidos por los otros es una condición de ciudadanía. Parece fundamental y urgente, frente a la actual presión de la dispersión, la segregación y la segmentación del área urbana como un magma indefinido, seguir “generando ciudad sobre la ciudad” mediante el diseño de espacios urbanos como éste, que recuperan la dimensión simbólica de lo colectivo, del encuentro, de la identidad.
Puede concluirse, de esta manera, que las Torres de Junior se constituyen en un sitio realmente singular dentro de la ciudad, que merece destacarse por la interesante síntesis que genera entre la escala urbana y la barrial, entre lo construido y lo natural, entre lo comunitario y lo individual, reflejada en la calidez espacial que ofrece a sus habitantes.
Mara Carmignani, Arquitecta. Profesora Asistente Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño, Universidad Nacional del Córdoba.
Fuentes Bibliográficas consultadas:
IPV. 1982. “Memoria Descriptiva del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV),” Departamento Estudios y Proyectos. Córdoba. Gentileza del Arq. Gustavo Bacile.
Jordi Borja – Zaida Muxí: 2000. El espacio público, ciudad y ciudadanía. Barcelona.
Montserrat Solano Rojo: 2008‐2009. “Modelos prestados”- Evolución de la vivienda colectiva después del Movimiento Moderno. Trabajo de Investigación. Programa de Doctorado de la Universidad de Málaga.
-
Arquitectos: Remo Moretti; Remo Moretti, Carlos Rouviere, Arnoldo Barale, Alvarez Rivero (José & Ignacio), Nestor Cagnolo.
- Año: 1983
-
Fotografías:Gonzalo Viramonte