La oficina KieranTimberlake se ha adjudicado la nueva embajada de Estados Unidos en Londres, luego de un concurso de 2 etapas con Morphosis, PEI Cobb Freed & Partners y Richard Meier como finalistas.
El edificio se emplaza en unos terrenos actualmente usados por industria en el lado sur del rio Támesis, y forma parte de un plan de revitalización del sector. Y es a esta escala donde el proyecto se ve más interesante, al abrir y conectar vías existentes con un nuevo parque junto al río, el cual es usado como distanciador por medidas de seguridad, en vez de resolverlo en base a muros. Así, el trabajo de paisajismo es parte fundamental del proyecto, volviéndose una pieza urbana más que un edificio encerrado.
Sobre este basamento se ubica el edificio, un riguroso cubo que rompe su monotonía a través de la piel. Esta se compone de paneles de ETFE (material reciclable, auto limpiable, resistente a los rayos UV), que protegen y aislan la piel vidriada del edificio. Esta piel está optimizada para sombrear la luz sur y oriente-poniente, mientras que permite la entrada de luz natural y mantiene las vistas hacia el exterior. En algunos ángulos (si se fijan en el render desde la cafetería) se produce sombra adicional donde se requiere a través de delgadas placas fotovoltaicas.
Estas placas se suman a una cubierta de paneles solares que oculta las instalaciones de la 5ta fachada, y permiten reducir la carga energética del edificio.
Créditos
Arquitectos: KieranTimberlake Architects
Paisajismo: Olin Studio
Ingeniería civil, mecánica y consultor sustentable: ARUP
Ingeniería estructural y anti atentados: Weidlinger Associates
Diseño espacios trabajo: Gensler
Consultor costos: Davis Langdon
Técnicos en seguridad: Sako & Associates
Renders: Studio amd