- Año: 2006
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Fotografías:Sandra Muñoz
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ubicado a la mitad de la carretera que une la capital de Baja California Sur con Cabo San Lucas, se encuentra Todos Santos. Pueblo mágico considerado para los extranjeros así como para los mexicanos que buscan un lugar de paz y tranquilidad con un clima excepcional.
Nuestro cliente, quien en Los Ángeles California, lleva una vida ajetreada busca en el pueblo del “Hotel California” tranquilidad y paz así como el reencuentro con la naturaleza y la forma de vida de uno de los pocos pueblos mexicanos que aún guardan esa magia de un México auténtico. El sitio cuenta con un contraste del paisaje desértico hacia el este y el Océano Pacífico hacia el oeste, así como un clima cálido durante todo el año. Por lo que se buscó crear una casa de playa/desierto que se abriera hacia la naturaleza pero de la misma forma que contara con seguridad ya que las casas no estarán habitadas durante todo el año, sino temporalmente.
El concepto inicial surgió de la escasez de materiales y mano de obra calificada en el pueblo, por lo que se buscó utilizar sólo gente local para la construcción de las dos casas, generando así empleo para la gente local y de la misma forma buscar darle un toque auténtico a las casas por medio de la “belleza de la imperfección”. Se utilizaron materiales como la “Talavera” que se ha utilizado en México desde hace muchos años, lo cual me llamó mucho la atención y por medio de los materiales típicos de la zona como el “palo de arco” y la tonalidad de su arena, se diseñaron las casas con una identidad mexicana vista desde una realidad contemporánea.
La humildad de utilizar sólo un nivel fue simplemente por guardarle el respeto a la naturaleza y por darle su lugar a la razón por la que la gente busca estos sitios remotos en el planeta: “la naturaleza”. Las casas se pierden en la naturaleza tal como el ser humano se pierde en sus sueños y busca esa tranquilidad como forma de vida. El proceso de diseño surgió del reencuentro con mi infancia en Guaymas Sonora, en donde vacacioné todos los veranos y se me quedaron grabadas “sensaciones” mas no detalles, recuerdos mas no fotos. Y de ahí surgió el deseo de utilizar la ventanería de metal, lo cual se ha utilizado en las casas de los pueblos de México por siempre. La herrería surgió de una forma de expresar la construcción de los barandales de las casas típicas tejidas con madera, las cuales son llamadas “palo de arco” y en el proyecto se reinterpretó el tejido, sólo que se utilizó acero ya que en el proceso de oxidación tomó una vida propia y las casas envejecen al igual que uno.
Si la dejas de ver antes un tiempo cuando regreses tendrá otro aspecto. Esas sensaciones son las que valen. Es el amor que se le tiene a una persona con las cual quieres envejecer. Así es como quiero que vean estas casas.
Su espacio principal o corazón, es el área de sala-comedor-cocina donde se conjugan las áreas para propiciar la convivencia y la unión familiar así como la simplificación de la construcción y de esta forma tener una sensación de espacio que se abre hacia el horizonte.