Hace unas semanas publicamos el proyecto ganador del concurso Hotel Centro 2010, de la oficina peruana Nómena. A continuación les presentamos el segundo lugar, por los argentinos Iván Lucas Sanchez, María Virginia Aroza y Valeria Del Vecchio.
El principal desafío fue proyectar un edificio contemporáneo en un casco histórico de casi 500 años donde conviven edificios construidos desde el siglo XVI hasta el siglo XX, lugar al que concurre la mayor afluencia de turistas tanto nacionales como extranjeros.
Partiendo de un programa acotado se define un volumen compacto cuyo principal objetivo es el diálogo con el entorno inmediato a través de la búsqueda tectónica-formal.
El proyecto contempla el completamiento de la esquina siguiendo una lógica compositiva urbana, planteando un volumen macizo y mono-material donde la distribución espacial opera sobre el mismo, alterándolo mediante quiebres y perforaciones, otorgándole a la fachada un dinamismo formal que expresa lo que ocurre en su interior y orienta al proyecto hacia las mejores visuales.
A nivel peatonal el abordaje al edificio se resuelve mediante dos sectores, el restaurant donde convergen tanto público interno como externo y el ingreso propio del hotel. Ambos quedan explícitos en la volumetría mediante dos operaciones formales diferentes, el quiebre y la sustracción.
Se define una planta libre de accesibilidad simple y pragmatismo funcional, que resuelve una continuidad espacial a nivel peatonal rompiendo la masa, despegándola, permeabilizando la planta baja de luz natural y uso social.
El cerramiento del edificio se resuelve mediante el empleo de un esqueleto metálico articulado que sostiene una envolvente construida con paneles de piedra de pizarra, y una estructura independiente de hormigón armado que libera a la piel de todo carácter portante, permitiéndonos intervenirla libremente.
La elección de la piedra le otorga al edificio una identidad de carácter contemporáneo sin perder el dialogo con el contexto inmediato.
Como respuesta al programa se busca optimizar el espacio y confort. El agrupamiento de las habitaciones por tipología resuelve la distribución interna de manera simple y funcional, generando dos bloques verticales orientados uno sobre cada fachada y articulados por un patio interno que juega como conector del proyecto.
Equipo de Proyecto: Arq. Valeria Del Vecchio / Arq. María Virginia Aroza / Arq. Iván Lucas Sánchez – Rosario, Santa Fe – Argentina
