El proyecto 'Construye para Crecer' de Susana Biondi Antunez de Mayolo y René Poggione Gonzáles (Poggione+Biondi Arquitectos) resultó ganador de la XIX Bienal Nacional de Arquitectura de Perú 2022 con una "propuesta integral de sostenibilidad vinculada a la eficiencia del manejo del agua, la energía y el ciclo de vida de los materiales propuestos", como indicó el jurado. Lo interesante es que no solo busca crear un humedal artificial que aporta a la ecología del sector, sino que la obra se materializaría principalmente en madera.
Esto convertiría al complejo residencial en uno de los más altos construido con madera en Sudamérica, abordando el tema del uso del material y de la eficiencia energética en el país: por un lado, afrontando la industria forestal con prácticas de manejo sostenible, y por otro, ofreciendo una opción con menor impacto ambiental en nuestro planeta, requiriendo un consumo mínimo de energía con un impacto muy bajo en su ciclo de vida.
Te presentamos el proyecto en detalle, a continuación.
Memoria descriptiva enviada por los autores. La propuesta considera la zona a intervenir, su historia y sus posibilidades de futuro, buscando ser una alternativa que mejore las condiciones no sólo de sus usuarios directos, sino de toda la zona. Diseña el parque colindante para recrear un ecosistema que brinde servicios ambientales, así como espacios de recreación y esparcimiento.
El parque propuesto se divide en dos franjas: la que se encuentra en una cota de terreno más alta corresponde a un ecosistema de bosque seco, mientras que la de verde más intenso recrea un ecosistema de humedal a partir de la recuperación del agua tratada proveniente del parque Huascar, agua a la que se le hace un tratamiento de fitodepuración en humedales artificiales del tipo subsuperficial, para luego almacenarse en una laguna paisajística en esta franja de parque, laguna que servirá de reservorio de agua para riego de áreas verdes y para abastecimiento de tanque de inodoros, evitando así el consumo de agua potable para dichos usos.
El conjunto residencial propuesto se integra al parque tanto espacialmente, como en la continuidad del ecosistema propuesto: con las especies vegetales y el tratamiento paisajístico, generando senderos que conectan el conjunto, a través del parque, con las vías principales y los paraderos y nodos multimodales de transporte.
Ya al interior del lote, los edificios se emplazan pensando en proyectar la menor cantidad de sombra sobre las áreas libres y sobre los edificios vecinos, y por ello se orientan principalmente en el eje Este Oeste, teniendo sus mayores fachadas hacia el Norte y hacia el Sur, asegurando así la mejor iluminación y control solar de todas las unidades de vivienda. El movimiento leve que se permiten dichos edificios, organiza la espacialidad de las plazas, con sus zonas de juego, de socialización, de comercio, de contemplación, de descanso, de producción, etc. Se proponen huertos urbanos tanto para unidades de vivienda privadas como otros colectivos, para incentivar esta actividad en la comunidad, la misma que se abastecerá de agua para riego de la laguna-reservorio del parque, en un sistema por gravedad.
El proyecto, al plantearse en construcción en madera, considera muy seriamente en tema de seguridad en caso de sismo o incendio. Se han tomado todas las medidas de seguridad y se están cumpliendo todas las normas y criterios técnicos aplicables. La estructura de madera y los tabiques divisorios, también de madera, tienen las dimensiones requeridas para su resistencia al fuego de dos horas. Para mayor seguridad, los núcleos de circulación vertical se plantean en concreto armado, y se ubican a ambos lados de cada edificio de vivienda, para así ofrecer la posibilidad de evacuar por dos rutas, cumpliendo el principio de alternancia que aplica a otras tipologías pero que lamentablemente no es obligatoria para edificios de vivienda. Consideramos indispensable proteger la vida aplicando este principio, por ello nuestra propuesta tiene dos núcleos por edificio.
Este conjunto residencial sería el primero y el más alto en madera de Sudamérica, y posicionaría al Perú en la vanguardia en vivienda sostenible, por muchos factores, entre ellos: 1) la protección de nuestros bosques amazónicos al incentivar la industria forestal con manejo sostenible, que es la mejor alternativa para que nuestra selva haga frente a otras actividades como la minería informal, la ganadería y la agricultura, que son las causantes de la mayor deforestación; 2) una edificación más sana para los habitantes, y con mucho menor impacto ambiental para el planeta, al ser la madera un sumidero de carbono es el material sostenible por excelencia, con un consumo de energía mínimo y un bajísimo impacto en el ciclo de vida, y recientemente se viene reconociendo su capacidad de construir en altura, y viene dando ejemplos de vanguardia alrededor del mundo.
La propuesta con diseño bioclimático, que resuelve asoleamiento, vientos, ventilación cruzada, y aislamiento, y esto combinado con sistemas de aprovechamiento de energía solar (paneles colectores solares y paneles fotovoltaicos) logra unas condiciones de confort con una gran eficiencia en el consumo energético, hídrico y de impacto ambiental de materiales comprobado con el análisis preliminar del sistema de certificación EDGE, con el cual demostramos un ahorro del 45% de energía, 46% de agua, y 70% de energía incorporada en los materiales. Esto se traduce en un ahorro de energía de 2,105 MWh/año, ahorro de agua de 118,890 m3/año y un ahorro de energía incorporada de los materiales de 73,700 GJ o una reducción de emisiones de carbono de 634 toneladas.
Susel Biondi es arquitecta y socia fundadora del estudio Poggione+Biondi Arquitectos. En 2002 hizo el curso de posgrado Sustainable Building and Urban Design en el IHS, Holanda. En 2008 terminó su doctorado en arquitectura sostenible en la UCL, Bélgica. Es docente en la PUCP, donde enseña en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo desde el 2003, y desde el 2017 también en la Maestría en Arquitectura, Urbanismo y Desarrollo Territorial Sostenible.
Entre el 6 y el 7 de junio, en Bogotá, Susel Biondi fue panelista y presentó este proyecto en el Seminario Internacional de Edificaciones Sostenibles y NetZero 2023, un evento organizado por CCCS, IEA, Uniandes, CAF y CEELA que buscaba generar el intercambio de información en torno a la construcción de edificios energéticamente eficientes y la implementación de normas y estándares en América Latina.
