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Arquitectos: David Closes
- Área: 2660 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Adrià Goula, José Hevia
Descripción enviada por el equipo del proyecto. A veces pueden ocurrir sorprendentes coincidencias. Entre 2003 y 2011 llevamos a cabo una intervención arquitectónica en el Convento de Sant Francesc, en Santpedor, para transformarlo en un auditorio. El proyecto se realizó en un antiguo convento construido en el siglo XVIII donde solo quedaba la iglesia; las alas conventuales y el claustro habían desaparecido. Cinco años más tarde, ubicados en la ciudad catalana de Manresa, nos encargaron desarrollar una asignación inversa a la anterior: una intervención en el Antiguo Colegio de San Ignacio, un antiguo complejo religioso basado en una estructura de convento cuya iglesia barroca fue demolida; solo quedaban las alas del antiguo colegio jesuita ubicadas alrededor de un claustro. En ambos casos, la intervención arquitectónica se realizó en edificios amputados de uno de sus dos elementos esenciales; en el proyecto actual, la antigua iglesia barroca.
La construcción de los nuevos accesos al antiguo colegio jesuita se enmarca en el proyecto de renovación global de todo el complejo construido, que debe racionalizar, refrescar y repensar los espacios del museo preexistente. Las intervenciones planificadas deben permitir que el edificio albergue el Museo del Barroco de Cataluña y el Museo de Historia de la Ciudad de Manresa.
El proyecto de los nuevos accesos al edificio propone un conjunto de volúmenes que incluyen tanto los nuevos espacios destinados al vestíbulo como los accesos principales a los pisos de exposición del museo. Los nuevos volúmenes, ubicados frente a la antigua pared divisoria de la iglesia, están dispuestos de tal manera que permiten la conformación de la nueva fachada del edificio pero al mismo tiempo otorgan vistas a las huellas más importantes de la antigua iglesia que permanecen en la pared divisoria.
La intervención en los nuevos accesos del edificio pretende ser algo más que solo una solución para la fachada oeste del antiguo colegio jesuita: la intervención propone una nueva forma de comprender tanto el edificio como su entorno urbano. Los nuevos accesos del museo crean un camino que permite admirar las vistas de los elementos clave del antiguo colegio (el claustro, las bóvedas de cañón o las huellas en la pared divisoria), vistas sobre los espacios urbanos adyacentes (la Plaza de Sant Ignasi y la orografía urbana de un antiguo arroyo) y, finalmente, vistas a los elementos significativos del patrimonio urbano y paisajístico de la ciudad (la basílica gótica de La Seu, la torre de defensa de Santa Caterina o la montaña de Montserrat). El camino creado por los nuevos accesos culmina, en su punto más alto, en un graderío que domina el paisaje urbano.
En resumen, el proyecto tiene como objetivo volver a significar tanto el sitio de la intervención como el propio edificio al restablecer vínculos con el pasado del complejo jesuita y con la ciudad.