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Arquitectos: Pablo Luna Studio
- Área: 160 m²
- Año: 2024
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Manta Yoga Shala es parte integral de Intaaya Retreat, un proyecto diseñado y construido por Pablo Luna Studio que se asienta sobre los acantilados de Nusa Penida, Bali. Intaaya es un tributo a la naturaleza, concebido con la premisa de crear una arquitectura que emerja del entorno y respete su esencia. Cada decisión del proyecto se tomó con un enfoque en la sostenibilidad, adaptando las construcciones al terreno y utilizando materiales locales. Como parte de esta visión, se implementaron sistemas de Waste Water Gardens en colaboración con la Biosphere Foundation, permitiendo el aprovechamiento del agua tratada para la irrigación de los jardines. La piedra caliza del sitio fue reutilizada para construir muros de contención y mezclas de tierra compactada, mientras que el bambú, cuidadosamente seleccionado y tratado en Bali, se utilizó como material principal para las estructuras, destacando por su durabilidad y capacidad para integrarse con el entorno natural.
El diseño de Intaaya toma inspiración del océano y las especies marinas que lo habitan. En el caso del Manta Yoga Shala, la manta raya sirve como referencia directa, con una estructura fluida y orgánica que refleja los movimientos de este animal marino. Construido a partir de arcos principales de bambú Petung negro, complementados por una estructura secundaria de gridshell del mismo material, el edificio sigue las curvas del terreno de manera natural, integrándose al paisaje con formas que evocan alas y cola. Su techo está cubierto con tejas de madera ulin hechas a mano, seleccionadas por su durabilidad y resistencia a las condiciones climáticas de la región.
En el interior, el Manta Yoga Shala se caracteriza por un diseño abierto que prioriza la ventilación natural y la conexión visual con el paisaje circundante. El suelo de piedra caliza pulida aporta una textura homogénea y resistente, mientras que la orientación estratégica del espacio asegura vistas amplias y despejadas del Océano Índico, estableciendo un diálogo visual constante entre el interior y el exterior. Un tragaluz central maximiza la entrada de luz natural, iluminando uniformemente el interior y reforzando su conexión con el entorno.
El Manta Yoga Shala destaca por su construcción en materiales naturales y un diseño que responde al contexto físico y cultural de su ubicación. La estructura equilibra un enfoque técnico en el uso de bambú y piedra local con una integración cuidadosa al terreno, logrando una síntesis entre funcionalidad y estética que conecta la arquitectura con la naturaleza de manera armónica.
