- Área: 30000 m²
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Fotografías:Fernando Guerra | FG+SG
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Proveedores: Effisus, Serge Ferrari
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Angola ha sido objeto de un proceso de desarrollo notable durante la última década, mostrando un importante crecimiento económico y una mejora progresiva en la calidad de vida de su población. Es un país clave en el contexto del continente Africano y un importante poder regional para la promoción de la paz y la prosperidad en la región.
Su capital, Luanda, es una ciudad vibrante y cosmopolita, reflejo de la nueva realidad que se está extendiendo a todo el país.
En este contexto, Angola fue elegida para ser la primera nación africana en organizar la Copa Mundial de Hockey sobre patines en 2013, y el pabellón fue diseñado como sede principal para el evento.
Junto con la capacidad requerida para 12.000 espectadores y el carácter emblemático que el edificio debe tener como el símbolo principal del evento, otros varios factores fueron tomados en cuenta en el diseño, tales como:
-Las limitaciones de tiempo y presupuesto, lo que llevó a un esfuerzo de optimización del diseño, haciendo uso extensivo de elementos modulares de bajo costo, que podían ser externalizados y rápidamente ensamblados en el lugar;
-La necesidad de adaptarse a los diferentes eventos deportivos, varios campos de entrenamiento y otros tipos de eventos, además de los deportes; lo que llevó a la utilización parcial de asientos retráctiles, con el fin de permitir una amplia gama de configuraciones;
-Los estándares internacionales de seguridad y confort, necesarios para un lugar capaz de acoger eventos de clase mundial, con el fin de garantizar las mejores condiciones de visión para los espectadores, todas las instalaciones auxiliares, y circulaciones fáciles e intuitivas, tanto en condiciones normales como en situaciones de emergencia;
-La eficiencia energética, mediante la maximización de la utilización de soluciones pasivas para la refrigeración y la ventilación de la arena y de las principales zonas comunes.
El objetivo principal del proceso de diseño era, por lo tanto, buscar la respuesta más eficiente y económica a estas preocupaciones, haciendo de las opciones estéticas, una consecuencia lógica de los aspectos técnicos y funcionales.
El edificio se organiza en cuatro niveles, el más bajo es un subterráneo y contiene las áreas técnicas y espacios auxiliares para los eventos deportivos, tales como vestuarios y áreas de entrenamiento para los atletas, zonas de almacenamiento, de estacionamiento y salidas de emergencia de la arena. Este nivel tiene la forma de un podio escalonado en el exterior, lo que permite un fácil acceso a todo el perímetro del edificio desde la cota cero.
El primer piso es ampliamente acristalado y concentra todos los accesos públicos y la galería principal de circulación - un anillo que rodea la arena - que da acceso a las tribunas y a todos sus espacios auxiliares. Dos tercios de los asientos en las tribunas son accesibles desde este nivel, sin necesidad del uso de escaleras o ascensores. El resto de los asientos se encuentran en el segundo nivel, y son accesibles por escaleras que suben desde la galería. El primer piso alberga todas las áreas VIP y de los medios de comunicación, y es accesible directamente desde el exterior, donde el acceso al sector VIP está indicado con un volumen en forma de caja en la fachada principal.
Todas las circulaciones horizontales de los niveles superiores del pabellón están organizadas como galerías periféricas externas. Las características climáticas de Luanda hacen posible esta solución, reduciendo el consumo de energía que implicaría una solución cerrada, y utilizando las galerías como un elemento activo en la ventilación natural de los espacios interiores y como una primera línea de protección contra los elementos.
Con el fin de garantizar la eficacia de esta solución, necesitábamos garantizar el sombreado de las galerías y reducir su exposición al viento y la lluvia. Para ello desarrollamos elementos modulares, que comprenden una estructura metálica que da soporte a una lona tensada perforada, llamada "velas".
Su modulación es, sin embargo, animada por la colocación de estos elementos como "escalas" que, de acuerdo con los diferentes ángulos desde los que se observan, parecen ser entidades aisladas que exponen el espacio interior, o se superponen entre sí, ocultándolo. Este efecto se complementa mediante la adición de un vértice hasta el borde exterior de cada elemento, y por la variación de la altura en la que se coloca. Esto determina un patrón ondulado que parece envolver todo el pabellón.
La iluminación LED que estos elementos reciben, refuerza aún más el efecto formal en la noche, con diferentes colores e intensidades, otorgando más expresividad al carácter icónico del pabellón.