Los arquitectos de Raumspielkunst, con sede en Stuttgart, han diseñado una gasolinera para Rancagua, Chile. Con el lema "una nueva generación de estaciones de servicio", el equipo ha desarrollado una gran cubierta de textil blanco y translúcido llamada "nube", la que tiene como función captar la energía solar a través de células fotovoltaicas y conducir el agua de la lluvia a través de sus finos pilares.
El Lugar
A su paso por Rancagua, la Ruta Panamericana se nos torna en una infinita línea recta. El lugar escogido para La Nube energética es un nodo en el que intersectan dos vías importantes: una industrial (Panamericana) que se dirige a Santiago y una turística (H-35) que conecta el Parque Nacional Las Palmas de Cocalán y la Reserva Nacional Río Los Cipreses, el Pacífico y los Andes. Es un punto por el que a diario circulan miles de personas, camino al trabajo o de vuelta a casa, a la ida o a la vuelta de Rancagua. El entorno es un complejo industrial con una gran oferta y demanda de bienes y servicios.
El Nodo Energético
La blanca, neumática, textil y autosuficiente "nube" está soportada por finos pilares cuya función es recolectar y distribuir energía solar gracias a las células fotovoltaicas dispuestas en su parte superior. El agua de la lluvia es reconducida a los colectores de los pilares por la geometría de la cubierta. La energía eólica modifica la presión interna de la estructura neumática y hace girar las turbinas incorporadas a los pilares. Esta energía sirve en primera instancia para el mantenimiento de la estructura y el excedente se reconduce a las tiendas, haciendo al complejo independiente de cualquier energía externa.
La Planta
El resto de las servicios orbitan alrededor de los surtidores de gasolina, situados en una gran explanada que sirve de acceso a los vehículos. Un edificio en forma de “L”, de hormigón y vidrio, cubierto por la Nube, aloja todas las tiendas: una panadería, una farmacia, un quiosco, una tienda abierta las 24 horas con toda clase de productos, una cafetería dónde desayunar, una vinoteca de marcas locales... todos estos productos están disponibles para el consumidor en su viaje.
Una Construcción Ligera
La Nube está compuesta por un textil blanco y translúcido, que genera una sombra difusa y sirve, además, como protección de la lluvia. Los altos y esbeltos pilares que la sustentan están fabricados en acero pulido y llegan a alcanzar los 12 metros de altura en algunas zonas. El remate de los mismos sirve para recolectar el agua de la lluvia; mantienen la presión del conjunto estable para así conservar la geometría, además de funcionar cómo luminarias, que por la noche modifican la atmósfera del lugar creando un oasis de luz.
* Texto por los arquitectos. Más sobre su trabajo en el siquiente link.
