Sólo en los Estados Unidos, más de 125 millones de botellas de plástico se desechan cada día, el 80 por ciento de las cuales terminan en basurales. Potencialmente, estos residuos podría desviarse y utilizarse para construir cerca de 10.000 viviendas, 1.200 metros cuadrados (teniendo en cuenta que se necesita un promedio de 14.000 botellas de plástico para construir una casa de ese tamaño). Muchos creen que este proceso podría ser una opción viable para levantar vivienda asequible e incluso para ayudar a resolver la falta de vivienda alrededor del mundo.
La idea no es nueva. En Nigeria, la casa de botellas ha demostrado ser todo un éxito, y han logrado convertir la basura en un material eficiente (y atractivo). Rellenando las botellas de plástico con tierra o arena, y luego apilándolas para ser amarradas y revestidas con barro, se puede construir una casa a prueba de terremotos que es 18 veces más fuerte que los ladrillos regulares. Más detalles en el video.