- Año: 2015
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Fotografías:Marcelo Villada, Tessa Donati, Nicola Roman Walbeck
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Paisaje
Solduno es un barrio en las afueras del centro histórico de Locarno, el sur de Suiza. Crecí a pocos pasos de aquí, en una zona de mansiones eclécticas burguesas de principios del siglo 20 y condominios de ladrillo de la década de 1960. Hoy en día la mayoría de los edificios de principios y mediados del siglo 20, han dado paso a edificios anónimos más recientes. El ingeniero que nos dio el encargo, estaba convencido de que, incluso en este contexto más bien aburrido, un proyecto distinguido no estaría fuera de lugar. Hemos adoptado la idea, valorando la oportunidad de construir un edificio moderno residencial y comercial, en sintonía con el lustre de un pasado reciente, y sin embargo, fusionando con el tejido de la vecindad. Proyectos en la ciudad son para nosotros un acto de reconciliación, una mediación entre el pasado y el presente. La interpretación de un sitio, su forma y su atmósfera.
La ciudad y el delta
La parcela está de entre dos frentes distintos y contrastantes. En un lado la naturaleza abierta, en el otro de la ciudad. Mirando hacia el sur los terrenos en pendiente que conducen a los bosques de la delta del río Maggia, en el norte una concurrida calle con mucho tráfico. Este es el último lote donde dos hileras de edificios se pueden insertar en ambos lados, por lo tanto, es un espacio de transición. Nuestra preocupación era crear un complejo abierto, integrando en su diseño los espacios vacíos y los frentes de los edificios adyacentes, en particular, el edificio Rino Tami.
Un barrio
Nos imaginamos tres edificios: un bloque urbano en via Varenna, y dos torres independientes que dan al río Maggia y las montañas. Los intersticios y espacios vacíos entre los edificios, conectan el complejo al panorama, la construcción de ladrillo Tami y los jardines cerrados de los edificios adyacentes.
Plantas
Plantas típicas 3er piso
El carácter espacial del proyecto se inspiró en las pocas casas antiguas que aún existen en la zona, y la memoria de los que fueron demolidas. Hemos puesto dos torres estrechas con una sola vivienda en cada piso, que recuerda a la tipología de la villa a piani (villa en plantas), apartamentos característicos burgueses de principios del siglo 20 en Milán. Este enfoque concede vistas al río y la montaña al edificio frente a via Varenna, convirtiendo un espacio de transición en un complejo unificador.
Plantas típicas 4to piso
En lugar de comenzar el proyecto trabajando en las plantas, empezamos con la sección, la planificación de tres alturas que varían encajando unas con otras de piso a piso; 2,31 m para las cocinas, 2,62 m para los dormitorios y 2,93 m para las salas de recepción. Cada apartamento dispone de diversas configuraciones, tanto en planta y sección, creando ambientes individuales diversificados. Algunas salas de recepción se enfrentan al patio interior, otros al río; Algunos se colocan en el interior del invernadero, y otros ofrecen espacio de estudio frente al delta.
Corte transversal
La espacialidad fluida dada por la falta total de pasillos, permite vivir el apartamento de una lado a otro, percibir plenamente desde el interior la verdadera dimensión del edificio. Incluso las logias, que fueron concebidas como espacio exterior, se pueden convertir en un jardín de invierno a la manera de las antiguas villas. Las fachadas de los edificios que dan al río, apuntan a la organización interior articulada del espacio (la modulación en las plantas, espacios y alturas) sin ser su mera fotocopia.
Corte longitudinal
Gracias a la utilización racional de tres tipos y dimensiones de ventana, se logró una unidad expresiva, a pesar de la gran variedad de situaciones. La calle urbana frente a la construcción presenta una estructura más lineal en bandas, tanto en planta y fachada. Esta fue nuestra respuesta conceptual al flujo de calle, dada por el sistema de un solo sentido de la vía Varenna. Sobre una planta baja totalmente acristalada, desarrollamos una calle totalmente cerrada, como una pantalla monumental.
Concepto de fachada
Hemos querido utilizar ladrillos para reforzar el vínculo con el adyacente edificio Rino Tami, pero con la ayuda de la tecnología del siglo 21 entregamos una reinterpretación contemporánea. En colaboración con ROB AG -que hacen programación digital de la ETH - y la firma Keller AG de Pfungen, Suiza, hemos desarrollado una fachada modular ensamblada por un robot. Los ladrillos de cada módulo se curvan para adentro o para afuera, recordando el bossage.
Elevación bossage de ladrillos “mosaico pixel“
Bloques de ladrillo que recuerdan pixeles, forman la imagen de la fachada. Su escala se eligió cuidadosamente para permitir combinaciones adaptables a las proporciones de cada una de las caras del edificio. ROB parametrizó matemáticamente los módulos para la producción, mientras que Keller desarrolló ladrillos personalizados en un tono arena de desierto, utilizando arcilla del Jura. Aplicando la combinación generada al azar de los paneles en cada una de las caras de las tres construcciones, hemos creado un mosaico de ladrillo, independientemente de las ventanas y las logias.
Cortar los marcos en la fachada sólida
De esta fachada sólida luego cortamos las aberturas ya previstas, siguiendo una lógica diferente, a saber, determinada por la alternancia de marcos y ventanas. Siendo los dos procesos independientes el uno del otro, el patrón y las relaciones de la fachada resultantes fueron totalmente impredecibles.
Dibujos de ensamblaje con ladrillos entrelazando los paneles
La oficina Keller finalmente subdivide los diversos elementos de paneles adicionales de diferente forma y tamaño, siguiendo una lógica más de montaje. Entre los diversos paneles, hay ladrillos de unión que tejen el mosaico de ladrillo. Finalmente toda la fachada se apoya en soportes de acero inoxidable y ganchos, un proceso que nunca había sido explorado antes.
Estudio de simulación de elevación 3D
El aspecto final tiene cualidades ornamentales textiles, al igual que la tela deshilachada, donde los ladrillos se han cortado para dar cabida a las aberturas de las ventanas. Todo el edificio recuerda a una cortina que se mueve con la brisa.
Conclusión
Este proyecto surgió en paralelo a Ca 'Bianca, pero no podrían diferir más. Si uno tematiza la precisión de una cuadrícula organizadora, el otro explora las posibilidades de la imprecisión y falta de alineaciones como potencial expresivo. La creciente presión económica determina plazos, y la compresión en los costos de construcción; es también causa de una creciente pérdida de precisión manual, a pesar de la muy apreciada precisión suiza. Tornamos la adversidad de la situación del mercado en una herramienta creativa, asimilando en nuestro diseño las imprecisiones relacionadas con habilidades manuales en la construcción. Las dificultades de ejecución fueron definir detalles y anti-detalles en el proyecto. Las paredes, aberturas y niveles nunca están alineados. Incluso el recubrimiento de ladrillo no es coplanar, a veces sobresale sobre las ventanas. De hecho no hay una correspondencia lineal entre interior y exterior. La fachada se puede considerar totalmente arbitraria, pintoresca y manierista en el estilo de un cobertizo decorado. La cuadrícula de ladrillo cubre o revela lo que hay debajo, sin tener en cuenta la pared o ventana enyesada.
Cà Bugnada probó que un proyecto sometido a desarrollos racionales y procesos lógicos, puede producir resultados informales, imprevistos y sorprendentes.
