- Área: 14250 m²
- Año: 2013
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Fotografías:Sindre Ellingsen, Njål Undeheim, Aeroview
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Proveedores: Arkos, Hunter Douglas, Trespa
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Rundeskogen es una colina arbolada que conecta tres centros de la ciudad en la costa oeste de Noruega.
Las viviendas unifamiliares y proyectos de vivienda de pequeña escala dominan esta región, creando un contexto que acentúa la excepcional altura y el volumen del proyecto. La densidad y la concentración del proyecto fue desarrollada para mantener la distancia requerida de una tumba vikinga recientemente descubierta en la misma ladera.
Las tres torres contienen 113 unidades en total, que van desde 60m2 a 140m2, con la torre más alta alcanzando 15 pisos. La construcción del núcleo es de concreto mientras que las piezas secundarias están hechas de armazón madera. Originalmente, las tres torres fueron diseñadas como construcciones de madera. Debido al deseo del cliente para construir de una manera más convencional, esta solución se reemplazó con híbridos de hormigón y madera.
El énfasis ha sido equilibrar la tipología de edificio alto con generosos espacios verdes públicos y atractivos en el suelo. Para minimizar el impacto de las tres torres y retener una vista al fiordo para los vecinos, los primeros pisos de apartamentos se han levantado de la tierra, en voladizo desde el núcleo. Esto crea espacios exteriores cubiertos sobre el nivel del suelo.
El elemento de organización de todo el proyecto es una estructura central con forma de estrella de hormigón, en el que las aletas se extienden como muros de separación entre los pisos. La forma prismática de la planta deriva de la optimización de planta de acuerdo a las vistas y el sol, así como la creación de puntos de vista en diagonal entre y alrededor de las torres. Esta disposición da cualidades volumétricas especiales - dejando que la luz y la sombra cambien gradualmente alrededor de las fachadas, un efecto que se acentúa por los paneles triangulares que reflejan la luz de forma diferente cuando se pasa por delante del edificio. En la planta baja, las aletas y los elementos de arriostramiento de este núcleo, similar a un tallo, se extienden como raíces que integran lugares sociales y de reuniones, instalaciones de juegos y de entrenamiento, generosos halls de entrada y espacios de reunión comunal.
Internamente, cada apartamento tiene un jardín de invierno integrado, que cuenta con fachadas de vidrio completamente aislados que permiten un uso flexible durante todo el año. Otras características ambientales que se agregan incluyen; colectores solares en el techo, recuperación de calor por aguas grices y bombas de calor geotérmicas que proporcionan calefacción.
Cada apartamento fue comprado con una bicicleta complementaria y los propietarios reciben sus propios árboles frutales en el espacio ajardinado.