- Área: 6500 m²
- Año: 2015
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Fotografías:Llano Fotografía
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Proveedores: Accesorios y Acabados, Vidplex, Vidrio Andino, Havells Sylvania, Hecatec, Impark, thyssenkrupp
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ubicado en el borde exterior de la zona rosa, muy cerca de las zonas más costosas de vivienda en Bogotá; este sector del barrio El Lago está emergiendo y cambiando de un modo de vida muy deteriorado y abandonado, por otro mejor impulsado, por universidades y escuelas que apostaron por una renovación urbana en el sector.
El edificio consolida un campus disperso en casas del barrio, tratando de involucrar al máximo la idea de un espacio público –universitario- que recorra el edificio desde afuera a través de un primer piso muy abierto con varias entradas y usos que dinamicen las calles, con un recorrido semi-público que traspasa, y asciende entre: ventanas, balcones, recintos, corredores con muchas escaleras –Escher- con diferentes formas de recorrer y vivir el edificio, activando no solo la vida exterior-interior sino generando también el aprendizaje no formal, el intercambio académico y cultural entre las carreras. El recorrido termina o vuelve a empezar en una gran terraza jardín y solario con gran vista a la ciudad.
Siendo finalmente entre muchas cosas, una escuela de modas, es importante no solo tener una eficiencia energética y control lumínico sino también que la vida académica y cultural del interior se muestre hacia lo público haciendo visible e irradiando actividad a toda hora; “Ver y ser visto” muy con esa noción de la moda y la estética actual queríamos un edificio de texturas y transparencias, muy cambiante y estimulante. El edificio trata de obtener la mayor cantidad de luz, pero la menor cantidad de radiación solar hacia las fachadas más expuestas al sol de tarde a través de una doble envolvente de vidrio serigrafiado, con un sistema modular pegado con silicona estructural que puede irse “armando” dependiendo de los usos colindantes.
El edificio “apéndice” administrativo -en concreto blanco- y donde se ubica el restaurante de práctica de la escuela “La Academia” evoca “el lugar o lugares ventana de C.Alexander” que salieron de los talleres participativos con los usuarios y profesores de LCI como símbolo de identidad. Premios, fotos familiares y arte se ubican allí. Dando otra escala a un uso especial e integrándose más tranquilamente a la manzana tradicional.
La eficiencia estructural, la flexibilidad de múltiples cambios en el tiempo, la ventilación cruzada controlada por sus habitantes, la indirecta controlada los espacios semipúblicos interconectados y semi-automatizados, y todas las políticas de sostenibilidad, el adecuado manejo y reciclaje del agua y el uso de energías pasivas fueron bandera del proyecto y de la escuela. El edificio es tal como es, “sin maquillaje“ con todas las instalaciones a la vista, sirviendo también como una herramienta de aprendizaje para los estudiantes.
El edificio de carácter muy urbano a su vez se ha convertido en un lugar para el encuentro de foros, eventos y talleres relacionados con sus carreras creando esta atmósfera de gestión + creatividad muy al encuentro de la esencia misma de la escuela La Salle College.
