- Área: 700 m²
- Año: 2016
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Fotografías:Frank van der Salm , Francois Duquesnoy
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Proveedores: Eternit, Bendewerk, Lambert Kozijnen
Descripción de los arquitectos. La Casa en el bosque tiene un aspecto pulido e industrial, mientras que la forma del edificio sigue siendo tradicional. La villa, construida por Studio Nauta, consta de un salón y una casa para dormir, conectados por un corredor abierto. Dos antiguos galpones que estaban sobre el terreno, se renovaron y conectaron al nuevo edificio.
La forma baja y fragmentada de la casa tiene como objetivo entrelazar la arquitectura y la naturaleza. El bosque puede crecer entre y más allá de la forma construida, llevando el entorno de dunas al interior.
El pasillo al aire libre que conecta los dos edificios también delimita el patio; un espacio exterior protegido con un árbol en el suelo de cemento, formando el núcleo de la casa.
Los grandes ventanales, que se extienden hasta el suelo, generan una relación fluida entre el interior y el exterior. Esta se refuerza aun más con el vínculo de ladrillo calado que expone varios momentos de viento y luz. El techo es tratado con un revestimiento reflectante mate, con el fin de absorber los colores siempre cambiantes de la zona como parte de la identidad de la casa.
Los clientes (tres hermanos) quisieron construir una casa en la que sus familias pudieran permanecer en comodidad al mismo tiempo. La nueva casa tiene un buen grado de privacidad con respecto a la casa vecina y la carretera.
Repartidas en 10 habitaciones, la casa cuenta con 24 camas. Todas las habitaciones tienen una vista única del bosque adyacente. Con el fin de evitar que los huéspedes se pierdan en los interminables pasillos, se creó un amplio corredor con dos etapas que conmuta con las ocho habitaciones.
