La propuesta de los arquitectos Rafael Carlos Gutiérrez y Elena Romero -fundadores de RSNstudio- es la ganadora del concurso internacional Hornachuelos Downtown Reactivation, organizado por Rethinking competitions junto al Ayuntamiento de Hornachuelos (España), a 96 kilómetros al noreste de Sevilla.
El concurso busca reactivar el casco histórico de Hornachuelos, potenciando sus valores patrimoniales y culturales, a través de la reactivación de edificios históricos, recorridos que generen espacios culturales, de descanso y conexión con el entorno natural y consolidar la percepción del casco histórico como un espacio unitario.
Memoria oficial: la intervención tiene como objetivo reconocer los hitos del lugar, tanto culturales, históricos como naturales, para que retomen su papel protagonista y pasen a formar parte de la vida activa del pueblo.
Para ello se propone un eje, un recorrido, que desde el punto más alto del centro histórico, la fortaleza, desciende hasta el camino de cárcavas, recorriendo los diferentes hitos y generando nuevos espacios de encuentro de diversas cualidades donde la vegetación y el entorno recuperan su protagonismo.
La fortaleza olvida su reciente pasado como objeto descuidado, para convertirse en el primer mirador. Un nuevo elemento activo que nos invita a observarlo desde sus limites en la plaza de armas y recorrerlo desde su altura para asomarnos hacia el resto del pueblo y disfrutar, con su posición privilegiada, del paisaje circundante.
Atravesando la fortaleza, una nueva plaza se abre al suroeste delimitada por el cine y el centro cultural, la cual, es pensada tanto para ser recorrida como para ser ocupada. Un nuevo parque de niños y dicha condición central la dotarán de continua actividad. El centro cultural servirá de núcleo y nexo entre la plaza y el paseo de Blas Infante.
Nuestro recorrido continua hacía la Iglesia, y tras ella, el ayuntamiento. La calle mayor, cuyo nuevo protagonista es el peatón, nos acerca a la Ermita. Descendiendo, nos encontramos con la posada, de destacada arquitectura y que se convertirá en un importante núcleo de actividad conteniendo un nuevo espacio museístico, la oficina de turismo y zonas de talleres para jóvenes. El antiguo colegio será reconvertido en un centro de mayores, con una zona de ejercicios, pista de petanca y huertos urbanos hacia su ladera este.
Antes de descender, finalmente, al paseo de las cárcavas para disfrutar de dicho valor natural, nos detendremos en el mirador que, con una nueva estructura de láminas de madera, nos resguardará a la sombra, y nos invitará una vez más a asomarnos y perder nuestra mirada en el horizonte.