El reconocido arquitecto español Josep Ferrando, académico de la ETSAB y director del estudio Josep Ferrando Arquitectura, fue invitado a participar en el proyecto ochoquebradas, creado por el grupo ochoalcubo, quienes intentan promover la arquitectura en Chile con encargos interesantes e innovadores. En esta oportunidad, como parte de un Plan Maestro en terrenos frente al mar al sur de la ciudad de Los Vilos, región de Coquimbo, el proyecto ochoquebradas busca desarrollar el diseño de casas para lotes individuales y para las comunidades, que armonicen tanto con su entorno geográfico y paisajístico como entre sí, asegurando una arquitectura de calidad a largo plazo.
En este contexto, el diseño de la Casa 8+1 ideada por el arquitecto catalán, se plantea como “un sistema de habitar que permite dar respuesta a cualquiera que sea su orientación y el cliente que la ocupe”. Proyecto de planta cuadrada y de modulación tipo grilla que fue pensado desde el centro del hogar: la cocina. A su alrededor, se montan 8 espacios indeterminados y abiertos que admiten distintos usos según sean las necesidades del usuario, generando de esta manera, un entramado de madera que impulsa las vistas interiores hacia el exterior, provocando "que el espacio físico se perciba mayor de lo que físicamente es”.
Descripción arquitecto: En el centro de la casa, el hogar. El fuego y la cocina, con 8 espacios indeterminados a su alrededor, convierten la casa 8+1 en un sistema de habitar que permite dar respuesta a cualquiera que sea su orientación y el cliente que la ocupe.
La flexibilidad, entendida como la versatilidad de un espacio para ser habitado en el tiempo de diversas maneras, permite proyectar la casa sin precisar del futuro cliente. La casa en sí misma funciona como un caleidoscopio de espacios habitables, que puede ir cambiando según qué cliente la ocupe.
Un cuadrado que en planta presenta un carácter isótropo como respuesta al entorno, mientras espera conocer su implantación definitiva.
Los 8 espacios indeterminados atraídos por ese único espacio central se categorizan en 4 interiores en las caras y 4 exteriores en las esquinas. Esta disposición evita la construcción de aristas convexas, y permite que la cruz interior -que permanece dentro del cuadrado exterior- aporte un aspecto de inacabado o en proceso al proyecto.El hogar se cubre mediante unos lucernarios que aportan ese carácter ancestral de reunión junto al fuego.
La tectónica del entramado de madera construye la parte mecánica al mismo tiempo que estructura el espacio, el cual deviene en un entramado que muestra el detalle de unión de las maderas que definen la construcción. Cuatro vigas de hormigón se apoyan en el territorio, dejando que la construcción de madera repose sobre ellas como si flotara sobre el paisaje, mientras este discurre por debajo de la casa.
La modulación del cuadrado en una grilla de 90cm x 90cm segmenta los espacios servidos y los servidores. El ancho de 90cm densifica la presencia de la madera y recinta 12 espacios para las zonas húmedas y de almacenaje, que consolida la forma de cruz dentro del cuadrado. Estos espacios servidores liberan sus puntos de encuentro y vuelven a dejar un espacio en cruz que articula los 8+1 espacios indeterminados del proyecto. Un conjunto de puertas ocupa esa cruz incorporando o segmentando, según se habite, unos espacios con otros.
Casa en Ocho Quebradas
Arquitecto: Josep Ferrando
Colaboradores: Joan Casas, Bia Coimbra, Stefan Kasmanhuber, Jesús Quintana y Mar Tarrida
Además, Josep Ferrando se encuentra trabajando en el diseño del primer hotel que se ubicará en ochoquebradas, el que utilizará como material principal las maderas desechadas de los moldajes ocupados en la construcción de las casas de Alejandro Aravena y Ryue Nishizawa, las cuales debieran finalizarse en los próximos meses.
Hotel en Ocho Quebradas
Arquitecto: Josep Ferrando
Colaboradores: Emanuele Piersanti, Lluís Garcia, Benedetta basile, Girorgia Lampognana, Jesús Quintana y Mar Tarrida