El galardonado pabellón chileno de la Expo Milán 2015, diseñado por el arquitecto Cristián Undurraga, desde sus inicios contempló la posibilidad de reutilizar el edificio para ser trasladado a Chile, razón por la cuál se decidió su construcción con una estructura desmontable de madera laminada.
Los pabellones chilenos que participaron de las pasadas ferias universales, generalmente permanecieron en los países anfitriones, con excepción del edificio construido en la Feria Universal de París en 1889 que volvió a Chile y que desde 1993 acoge al Museo Artequín en la Quinta Normal de Santiago.
En el caso del pabellón de la Expo Milán 2015, se aprovechó la estructura para trasladarse y reconstruirse en la ciudad de Temuco, destino escogido por la Presidenta de la República, al sur de Chile, en las faldas del Cerro Ñielol. El objetivo de esta instalación será el de entregar a la zona un centro de encuentro y difusión cultural de los pueblos originarios y la gastronomía del país.
Las obras de reinstalación del pabellón fueron iniciadas en agosto de 2016 y apoyadas por la Intendencia Regional de la Araucanía, la Municipalidad de Temuco y por diversas organizaciones locales.
Se dividieron en tres etapas: primero se realizaron las fundaciones y la instalación de pilares metálicos que incorporaron tecnología antisísmica, luego se dio paso a la etapa de montaje de la estructura laminada y finalmente, una tercera etapa correspondiente a las terminaciones e instalaciones del edificio, las que incluyen el equipamiento tecnológico parte del contenido y recorrido audiovisual presentado en Italia y la plaza cívica que se emplaza entre las calles Bulnes y Prat, frente al edificio y que se constituirá como nuevo espacio público y esparcimiento de la ciudad.
Las labores las dirigió Lorenzo Constans, excomisionado General de Chile para la Expo Milán 2015, quien contó con la colaboración de la arquitecta italiana Federica Pugliese, como supervisora de las obras, invitada a la reconstrucción dado su amplio conocimiento del edificio luego de participar en su construcción original en Italia y en su desarme.
El proceso de reconstrucción del pabellón acaba de finalizar su tercera etapa, cuya reciente entrega fue celebrada el pasado 19 de agosto con un tijeral y con un recorrido audiovisual por los diferentes espacios del recinto, para el grupo de trabajadores y obreros que estuvieron involucrados en su construcción.
La inauguración y apertura al público del pabellón debiera realizarse en los próximos días, junto con la puesta en marcha de un programa de funcionamiento al interior del edificio. Su administración estará a cargo de un grupo intersectorial compuesto por entidades públicas y privadas, apuntando a la realización de actividades vinculadas con la productividad y economía de la Región de la Araucanía.
