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Arquitectos: Oficina de Diseño, Taller Brigada de Arquitectura; Oficina de Diseño, Taller Brigada de Arquitectura
- Área: 369 m²
- Año: 2017
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Fotografías:Adrián Llaguno
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Proveedores: Ternium, Cementos Tolteca, PROLAMSA
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Contextualizándose a Chiapas, el sitio es determinante entre sus diversidades climáticas. El pueblo de Tecpatán se encuentra en medio de la selva húmeda del norte. Sus habitantes están habituados, desde tiempos milenarios a las inclemencias climáticas, generando un mosaico social de intenciones que llegan a reflejarse en sus espacios y modos de vida. Dadas las condiciones físicas, se obstaculiza el desarrollo socio económico, por su difícil acceso, el cual ha sido aprovechado principalmente para la ganadería. Generando fuertes grietas en la distribución de riqueza.
La colaboración a la que se llegó, implicó una noble intención de mejorar las comunicaciones arquitecto-político; donde la iniciativa surgida por el Ayuntamiento local para solucionar el acceso a medios informáticos de la población para el desarrollo educativo, quedara resuelto. Si bien es una intención mediática para el caso de pueblos rurales donde pocas veces es atendida la problemática -o es atendida por medio de prototipos fuera de lugar-, que bien lo valía.
Fue en esa coyuntura con la que se llegó a una propuesta que surge de un determinante comprender de la región -ya que es un paisaje climáticamente activo-, y en esas mismas condiciones se generan oportunidades para la búsqueda de un lenguaje arquitectónico autóctono, artesanal, natural, político y aspiracional. Fue clave entender las técnicas constructivas tradicionales frente a la avanzada de materiales industrializados, además de innovaciones constructivas locales, para que así en síntesis se lograra un lenguaje óptimo para un espacio educativo. Mismo que queda bajo el encanto de la exuberancia paisajística que ofrece la selva mexicana y sus fenomenologías, las cuales bajo esta arquitectura solo piden ser enmarcadas.
El programa está comprendido por actividades de consulta digital y un área de soporte. Fue así que se determinó separar estas actividades en dos contenedores. El primer contenedor alberga un aula taller equipado con computadoras, el segundo un área administrativa, servicios y una cafetería al aire libre. Todo eso se desplanta sobre un firme de concreto que luego se alterna entre una fábrica de ladrillo aparente con estructuras de concreto desnudas, los vanos van de piso a techo en una intención de matizar la luz al interior. El aula taller esta acentuada por un “cielo raso” de ladrillos, completando así todo un espacio donde se comunica al usuario de su intención constructiva, como un ambiente puro, para las expresiones propias de la comunidad, además que se trata de una innovación constructiva llamada “Domotej” desarrollada por el Dr. Gabriel Castañeda catedrático de la Universidad Autónoma de Chiapas.
Fue importante proteger todo lo desarrollado de las exigencias climáticas por medio de una cubierta hecha de piezas de acero y láminas, la cual también propone una serie de inclinaciones dinámicas que a su vez permiten convertirse en una doble cubierta por donde se hace circular viento para la climatización natural de espacio. Se vacía el centro de todo el conjunto por medio de un pequeño patio jardín a manera de la vivienda tradicional y así se rodee paseando por todo el pasillo circundante del espacio, además de acentuar y permitir que la vegetación local se vuelva protagonista.
Es así como se conjugan diversas tradiciones ancestrales, conocimientos, aportaciones y responsabilidades en decisiones políticas sabias para llegar a un acuerdo de trabajo que se resume en una pieza arquitectónica esperanzadora, educativa; que abre la crítica, y la propuesta de la labor en las zonas rurales y sus implicaciones en el desarrollo social de esta era altamente globalizada y donde la creación de comunidad importa poco.
