Organizado por la Sociedad Central de Arquitectos (SCA), el concurso nacional proponía formular un plan de ideas para la urbanización de una playa ferroviaria en Colegiales, Buenos Aires, Argentina.
El jurado otorgó el primer premio a los arquitectos autores Marcelo D’Andrea, Oliverio Najmias (NOA) y los colaboradores Shain Ben Ami, Nayla Budziñski, Agustín Crosa, Jacinta Gonzalez Llamazares, Lucía Griotti, Ivana Pruden, Camila Santos Solano, María Emilia Soto, Matías Spina, Charles Weinberg, Atilio Pentimalli (renders). Revisa el proyecto a continuación.
Descripción por los autores. El pedido de las bases tiene la ambivalente necesidad de los vecinos existentes y del propietario de la tierra. Así, creemos necesario, por un lado atender la mirada del vecino que hoy vive en la zona, y por el otro dar solución a la necesidad del propietario de la tierra que, dentro del marco de la ley que lo regula, busca el mayor beneficio.
Entonces surgen algunas preguntas obligadas. ¿Cómo hacer para sumar 80.000 m2 de superficie en el área del concurso, maximizando el precio de venta de las unidades futuras, a la vez de aumentar al máximo posible las áreas de espacio público?
¿Cómo minimizar o eliminar el conflicto con los vecinos frentistas al predio para que no sientan que las nuevas construcciones les tapan las visuales?
¿Se puede pensar alguna unidad de gestión adicional que genere más recursos sin comprometer las relaciones público/privado y verde/construido?
La división parcelaria y su impacto en la relación con los vecinos de Colegiales
Pensando en la convivencia con los vecinos, y previendo la generación de los consensos necesarios, es que se plantea una parcelaria que minimiza los frentes sobre la calle Moldes y maximiza las visuales desde y hacia el parque sin renunciar a la posibilidad de tener un parque continuo desde Virrey Avilés hasta Federico Lacroze.
Los edificios se plantean como unas torres, tipo placas, con su lado menor de no más de 19 metros sobre la calle y con su lado mayor haciendo frente a los espacios verdes propuestos, lo que entendemos mejorará la calidad de los edificios a construir y su valor.
Las calles perpendiculares a las vías penetran en el terreno y los edificios hacen frente sobre las mismas para generar un tejido urbano contundente, donde en sus plantas bajas crea una situación de comercio urbano de pequeña escala.
La división parcelaria está pensada para minimizar los efectos negativos sobre los vecinos existentes, maximizar las condiciones de las situaciones urbanas y generar unidades premium frentistas a los nuevos espacios verdes propuestos.
Las directrices de diseño
Siguiendo las ideas planteadas por la Arq. Tina Saaby para la ciudad de Copenhague, se sugiere para el nuevo área directrices de diseño que vayan más allá de las normativas indicadas en el CPU. Se busca así pensar una ciudad que genere contacto visual, esto aumenta la seguridad y el bienestar de los vecinos.
Los cerramientos (barandas) de expansiones serán transparentes, sin antepechos; los aventanamientos llegarán transparentes hasta el piso, sin antepechos, para que pueda mirar hacia abajo y tener contacto con el otro.
Las plantas bajas se podrán hacer privadas pero tienen que ser transparentes. Estas podrán ser abiertas o cerradas, pero siempre manteniendo el concepto de la transparencia y apertura. Y se sugiere que por lo menos el 16 % de las superficies a construir dentro de cada parcela se dedique a Accesos y Areas Comerciales de Proximidad y de Gastronomía
Las cubiertas seran verdes, para mitigar el impacto de los edificios en el entorno.
Unidades de Gestión
Para la mejor etapabilidad y éxito de la propuesta, se propone dividir el proyecto en Unidades de Gestión, que pueden realizarse según mejor convenga.
El Parque
Las parcelas se encuentran implantadas dentro de un gran parque verde unificador, el mismo cuenta con tres escalas de espacios diferentes. (jardín público – plaza y parque)
Se plantea para el área una zona de remediación con una cobertura vegetal de gramíneas nativas. Minimizando el consumo de agua y el costo de mantenimiento, favoreciendo a la presencia de la fauna autóctona (aves, mariposas, insectos).
La grama, es un espacio de unos 5000m2 con escala de jardín público, despojada de todo tipo de ornamentos, es simplemente un gran césped.
Es un espacio controlado en su perímetro ideal para que madres e hijos muy pequeños asistan a realizar un picnic, leer un libro o realizar un trabajo utilizando internet pública y gratuita.
Por último el parque construido, un espacio verde que se encuentra consolidado al Sur, limitando con la calle de ingreso de servicio. Y que por debajo del parque construido, es donde se disponen los estacionamientos concesionados.
El parque nuevo posee una importante arboleda de especies arbóreas nativas, que junto con los arboles de la plaza Paso ya existente, forman un buffer vegetal que aísla a los usuarios del entorno construido.
El nuevo parque incorpora al existente y lo pone en valor, permitiendo tener espacios de pleno y otros con mucha sombra fresca.