Un día completo de la XXI Bienal de Arquitectura y Urbanismo de Chile estuvo dedicado a la ciudad invitada, São Paulo. Todo partió con la presentación de la selección de obras de arquitectura, proyectos estudiantiles, investigaciones y publicaciones representantes de esta ciudad que participaron en la convocatoria del evento.
Según explicó la curadora de la muestra, Paula Monroy, “fue una jornada cargada de un tono bastante político respecto a la forma en que se está viviendo en la ciudad de Sao Paulo y nuestro continente. Abordamos temas relacionados a la tecnología, a la importancia de los movimientos sociales y a la participación ciudadana en la construcción de ciudades más resilientes para estos tiempos”.
Durante la mañana, Marcella Arruda, artista y arquitecta del colectivo “A Cidade Precisa de Você” presentó el proyecto “Arquitetura da Liberdade” y realizó un taller de dinámicas corporales para la construcción de lo común en la que participaron los visitantes del lugar.
El público visitó la instalación temporal “São Paulo: Diálogos y límites” que buscó crear una lectura sobre la llamada clase media paulistana “constituida por una serie de subgrupos que se esparcen por el territorio entre poblaciones empobrecidas y elites, dando origen a una arquitectura formal y delimitada, y a otra informal e improvisada con los recursos que se tienen a mano” explicó Monroy. La instalación tenía un único material: la malla de la fachada para la restauración del edificio Copan. Este objeto banal e inicialmente temporal, cubrió durante los últimos cuatro años este hito arquitectónico proyectado para la clase media de los años 50, transformándose en parte del paisaje urbano y del imaginario colectivo de la ciudad.
Más tarde se llevó a cabo el foro “Arte, participación y resiliencia” donde confluyeron mujeres que hablaron sobre la función política del arte y la cultura en la construcción de la ciudad: Juliana Braga (SESC); Helena Cavalheiro (FAU-USP), Maria Claudia Levy (Goma Oficina) y Marcella Arruda (A Cidade Precisa de Você) “expusieron proyectos que hablan de cómo construir relaciones sociales, de lo importante que es reconocer a la comunidad y sus potencialidades antes del desarrollo de un proyecto con el fin de articular iniciativas de convivencia o resistencia frente a los actuales sistemas de planificación social y urbana” detalló Monroy.
Durante la tarde Giselle Beiguelman (profesora FAU-USP, artista y escritora) presentó su libro “Memoria da amnésia: politicas do esquecimento” (Memoria de amnesia: políticas del olvido), que reúne ensayos textuales y visuales sobre las estéticas y políticas de preservación de la memoria y las acciones sistemáticas que las transforman en “política del olvido”. El libro se desarrolló en base a proyectos realizados por la autora en diferentes contextos urbanos y en las redes sociales.
Finalmente, se sumó a la jornada Guilherme Wisnik (profesor FAU-USP, arquitecto, curador y crítico) quien habló de su libro “Dentro do nevoeiro” (“En la niebla”) donde se refiere al mundo tras la caída del muro de Berlín, de las Torres Gemelas y el reciente incendio del amazonas en Brasil “se generó un diálogo interesante entre los expositores y el público asistente en torno a cómo los sistemas tecnológicos y el capitalismo están influyendo en nuestra forma de relacionarnos con la arquitectura, la ciudad y nosotros mismos”, concluyó Paula Monroy.
Vía Comunicaciones XXI Bienal de Arquitectura y Urbanismo.