BEFORE/AFTER, o, en español, ANTES/DESPUES, es un trabajo de registro que documenta los drásticos cambios, tanto tangibles como intangibles, que ocurrieron en China tras la reforma de los Hutongs –específicamente el Hutong Fangjia de Pekín- entre abril y septiembre de 2017. El trabajo fue llevado adelante por OPEN Architecture y formó parte de la exposición inaugural del Museo de Arte de Pingshan "Ciudad Desconocida: La Arquitectura y la Imagen de la China Contemporánea" en 2019.
Luego de las transformaciones realizadas en el casco antiguo de Pekín, las heterogéneas vidrieras y frentes de locales que animaban la vida urbana fueron eliminados y sustituidos por fachadas homogéneas y los hutongs, estrechas calles que solían albergar numerosos cafés, restaurantes, bares y tiendas, perdieron repentinamente su identidad.
BEFORE/AFTER emplea la comparación grafica –exponiendo imágenes representativas del antes y el después de la transformación- para fomentar la reflexión de los ciudadanos sobre cuestiones urbanas críticas relativas a la libertad y la autoridad, el progreso y la nostalgia, la inclusión y la exclusividad, la colectividad y la individualidad y, en última instancia, el futuro de nuestras ciudades. A través de este estudio, OPEN Architecture espera fomentar debates que ayuden a comprender los puntos relevantes de la vida urbana y el tejido de las ciudades.
Li Hu, arquitecto y socio fundador de OPEN Architecture, ha trabajado durante muchos años en Fangjia Hutong, siendo testigo de los cambios radicales del sector en primera persona. Hu argumenta que la mayoría de los trabajos de renovación realizados se centraron únicamente en el embellecimiento de las fachadas existentes, basándose en algunas suposiciones superficiales acerca de la historia de los Hutongs.
El arquitecto destaca que cuando se trata de temas como la restauración del patrimonio o la planificación urbana, la atención suele centrarse en la imagen de los edificios más que en su trasfondo histórico. Nuestras ciudades nunca son postales estáticas, nuestras ciudades están vivas.
Si atraviesas las renovadas y pulcras fachadas de estos Hutong y entras en su interior, donde ocurren las verdaderas historias, te darás cuenta de que los viejos dramas de la vida diaria aún están latentes en este complejo barrio. Las brillantes fachadas de los edificios no reflejan en absoluto lo que realmente está pasando detrás de ellas. En la vida real, los residentes de los hutongs tienen que caminar por las calles todos los días para tener acceso a baños públicos, viviendo con estándares mínimos de sanidad y dignidad.
La pregunta que queda es: ¿estamos creando edificios hermosos, o estamos realmente diseñando para la gente que tiene que vivir y usar estas estructuras todos los días? El proyecto debería centrarse realmente en el ser humano en lugar de estar impulsado por la política; deberíamos estar diseñando una forma de vivir, no una forma de "mirar", reflexiona Li Hu.