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Arquitectos: Chon.a
- Área: 400 m²
- Año: 2020
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Fotografías:Quang Chon
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Cada casa tiene un alma hermosa. Las situaciones circundantes para diseñar una vivienda siempre son ventajosas cuando la gente las entiende, y siente dentro de ellas, una mente pacífica y compartida.
El terreno está situado en una gran carretera en el centro de una zona urbana recién formada. La radiación solar directa que golpea al mediodía, junto con el ruido del tráfico y el polvo, fueron todos factores a mencionar cuando estudiamos el estado actual del terreno.
Los espacios con terraza y el sistema de azotea aterrazada crearon jardines de piso continuo, con profundos reveses que protegen del sol caliente de la tarde. Desde cada dormitorio, la gente siente la luz del sol de la mañana brillar a través del follaje verde junto a los grandes ventanales. En los pasillos de la casa se forman terrazas abalconadas, creando áreas entre el espacio público y el espacio privado. Estas contienen áreas verdes, ven la transición de la luz durante el día, poseen vistas y generan la tan buscada conexión humana.
Con una atmósfera tradicional y material moderno, intentamos reconciliar la vida externa con la vida espiritual de cada humano, devolviéndoles la paz en su alma interior. La superficie del agua, los árboles, la luz y los vientos frescos permiten que la gente y la naturaleza vivan juntas, compartiendo el día a día.
La naturaleza es una maravilla terapéutica que se le ha otorgado al hombre, sintiendo la vida a través de cada rayo de sol, brote verde o brisa; en cada respiración, en cada rama o incluso en la superficie de un lago en calma. La tranquilidad está siempre presente en cada espacio, haciendo que la gente también sienta paz desde lo más profundo de su alma.