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Arquitectos: Carazo Arquitectura
- Área: 457 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Fernando Alda
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Proveedores: Adobe, AutoDesk, DEKA, EVENTOS CARLOS GIL, IPF, OMA, Sylvania Lighting, TROPICO VIVO
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Nuestra visión del futuro de los espacios de oficinas se plasma en este proyecto en donde prima la calidad de vida y el confort natural de sus usuarios, reduciendo lo mejor posible el impacto al ambiente, en vez de enfocarse en la tecnología como único o principal elemento de un sitio de trabajo.
Programáticamente, la oficina está diseñada para adaptarse a los requerimientos del futuro, que varían cada vez con mayor rapidez. El espacio permite ser configurable según sus necesidades, a partir de su planta libre y la composición de elementos que sugieren diferentes usos, como la gradería, que transforma la oficina en un escenario de expresión artística, de proyección audiovisual o en un auditorio de capacitación y discusión teórica.
El diseño biofílico, es decir: el diseño que busca “la afiliación emocional innata de los seres humanos a otros organismos vivos” (Edward O Wilson) procura que las personas puedan estar en contacto directo con la naturaleza, percibiéndola con todos sus sentidos. Esto se logra a partir de la implementación de su sistema de capas: en una capa inmediata se encuentran las plantas que conviven en cada uno de los espacios de trabajo y se mantienen gracias a la ventilación e iluminación natural; la segunda capa se compone del jardín vertical interno. La tercera capa propicia la relación entre espacio interior y los jardines central y posterior, con amplios ventanales. La capa final está constituida por la piel vegetal de la azotea del edificio, que se trata de una cubierta ajardinada con plantas y árboles que absorben calor, capturan carbono y liberan oxígeno. A nivel perceptual y visual, el componente vegetal de cada capa se complementa con una materialidad que se expresa con autenticidad y sobriedad. A nivel sensitivo, la sensación confortable de la temperatura regulada naturalmente se añade al efecto de iluminación natural.Adicionalmente, la particularidad del sitio en donde se proyectó aporta la importancia de la intervención de un edificio con noventa años de historia, que es puesto en valor rescatando la belleza de la arquitectura antigua y armonizándola apaciblemente con texturas y materiales sobrios. Además de la reactivación de un lugar que contribuye a la recuperación de la ciudad de San José.
Estos proyectos generan espacios inéditos, con una integración diferente de la naturaleza en la ciudad de una manera simbiótica. Todos ellos juntos articulan una sola visión, la forma en que visualizamos cómo debe ser el futuro.