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Arquitectos: Atelier Deshaus
- Área: 43080 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Fangfang Tian, Shengliang Su
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Museo Qintai está situado a orillas del Lago de la Luna, en el distrito Hanyang de Wuhan, frente a la colina Meizi, al otro lado del lago, hacia el sur. Para reducir el peso de la masa arquitectónica sobre el entorno natural, se utiliza la forma de un terreno ondulado, al tiempo que se sumerge parte de los espacios de exposición bajo tierra, lo que permite su uso subterráneo y minimiza la masa sobre el suelo. Por otro lado, en la fachada que da a la calle, un elemento vertical defiende la urbanidad de la arquitectura.
La cubierta ondulada está formada por una terraza escalonada abstracta que sigue los contornos topográficos. Las contrahuellas de los escalones están revestidas con superficies metálicas plateadas, mientras que los peldaños están cubiertos de piedras blancas y vegetación baja, atravesados por sinuosos senderos de tablas.
Estos caminos en la azotea están totalmente abiertos al público, conectando con el Lago de la Luna, así como con las salidas de los espacios de exposición del museo, el espacio para la educación pública, la tienda de arte, la cafetería y los demás espacios públicos. Así, forman un marco de espacio público independiente de los espacios de exposición del museo. Las actividades del público forman parte de la superficie arquitectónica.
La arquitectura del museo de arte como intervención ha redefinido el espacio urbano en la orilla sur del Lago de la Luna. Al oeste del museo, el espacio está reservado para una plaza urbana, que interactuará en el futuro con la Biblioteca y el Centro Dramático de Wuhan, en fase de planificación.
La entrada principal del museo, así como los programas con fuerte contenido público, incluidos los Espacios Culturales Creativos, se sitúan todos en este lado, donde una fachada sutilmente curvada hacia el interior, junto con el lugar, crea una sensación de cerramiento. Desde la plaza hay caminos en rampa que conectan con la cafetería del segundo piso y la terraza de la azotea, estableciendo una circulación pública que podría seguir funcionando después del cierre del museo. Desde el punto de vista operativo, esto refuerza la apertura del museo y la urbanidad de la arquitectura.
El vestíbulo principal, junto con la cubierta ondulada, crea un espacio único para la exposición. El espacio expositivo utiliza paredes flotantes, y ya no hay una circulación establecida para visitar la exhibición. Los muros son tanto superficies de exposición como la estructura del techo ondulado.
Los espacios de exposición para el arte contemporáneo, el arte moderno y el arte clásico, así como para las exposiciones especiales, pueden ser accesibles de forma independiente o estar conectados de forma secuencial, por lo que tienen una gran flexibilidad funcional.
