- Área: 4317 m²
- Año: 2022
-
Fotografías:Alejandro Gómez Vives
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La propuesta arquitectónica para la construcción de una residencia para gente mayor en Pòrtol, consiste en la implantación de un edificio de tipología compacta, de PB+1+Sótano y de planta rectangular, estructurada alrededor de cuatro patios ajardinados en su interior.
El solar, limita al norte con un entorno de protección arqueológica que conserva su aspecto de zona verde arbolada. Se propone enlazar ambos solares a partir del tratamiento especial de sus zonas verdes fundiéndolas, entre sí, como una única masa forestal. Los árboles tienen un papel destacado en la propuesta, su presencia la encontramos tanto en las fachadas sudoeste, sud-este y Nord-este, así como en los patios interiores.
El edificio se asienta con naturalidad y discreción en el entorno urbano y con una clara vocación de contención y coherencia formal. Tiene la escala singular que identifica a los edificios públicos, pero con un lenguaje discreto y preciso. Su fachada esta modulada y definida a partir de la repetición sistemática de un mismo sistema de aberturas, de composición vertical, que, al multiplicarse de forma pautada a lo largo de las fachadas, proporciona el contrapunto a la horizontalidad del volumen construido y le permite insertarse en el entorno construido con una escala adecuada
El programa del edificio se organiza en cuatro bloques funcionales: tres destinados a los módulos residenciales, áreas de servicios específicos, dirección y administración, y el cuarto, ubicado en la planta semisótano del edificio, que se destina a servicios generales y del personal. El área residencial está distribuida en cinco módulos de habitaciones. Cuatro de estos módulos se sitúan, en planta baja y planta piso, alrededor de los dos patios situados en los extremos del edificio. El quinto módulo ocupa la planta primera de la superficie situada entre los dos patios centrales.
Los patios posibilitan que todas las dependencias y zonas de circulación tengan luz natural, ventilación cruzada, y vistas sobre un espacio exterior quilificado. El tratamiento de vidrio de sus fachadas perimetrales, proporcionan una excelente relación del espacio interior con el jardín, y posibilita un fácil control visual de los módulos de las habitaciones. Los dos patios centrales se prolongan hasta la planta sótano de manera que las dependencias de servicio tienen también luz y ventilación natural.
El proyecto se ha redactado a partir de criterios medioambientales y de eficiencia energética máxima y trata de aproximarse a un edificio de demanda energética Zero. Con la obtención de una calificación energética A, la intervención prioriza las estrategias pasivas sobre las activas y reduce la demanda energética, garantizando la eficiencia del edificio. Se trata de un volumen compacto y eficiente gracias a la sencillez constructiva. Los patios interiores permiten que se produzca una refrigeración adiabática que junto con la ventilación cruzada permite minimizar las pérdidas energéticas, reduciéndose el consumo de refrigeración en verano.
La protección solar es individualizada para cada espacio, mediante” screens” exteriores motorizados que se activan cuando se detectan una alta incidencia solar o de viento, optimizando el rendimiento energético. La disposición de pérgolas vegetales caducifolias protege las terrazas de uso exterior en verano y permite la entrada de radiación solar en invierno, convirtiendo los espacios intermedios en captadores energéticos. La piedra de Marés proviene de canteras locales y en general se ha priorizado el uso de materiales fácilmente reciclables y producidos en la isla. Se ha conservado todo el bosque de pinos del parque arqueológico y la vegetación se ha completado con la plantación de especies mediterráneas en los patios y zonas de recreo exteriores.