Los estantes tienen una función clara: organizar, almacenar y exhibir. Este papel simple pero vital los ha convertido en una necesidad en todos los hogares, manteniendo el lugar limpio y ordenado al sostener libros, ropa, juguetes o cualquier otro artículo que de otro modo estaría esparcido por el suelo. Aunque generalmente se encuentran en armarios, dormitorios, baños y cocinas, los estantes son útiles donde sea necesario el almacenamiento adicional. Son especialmente ideales para aprovechar al máximo las habitaciones pequeñas, que siempre se beneficiarán de tener un espacio de suelo más limpio y ordenado. Respondiendo a esta necesidad crucial de almacenamiento y siguiendo un enfoque estricto de 'la forma sigue a la función', los estantes tradicionales a menudo se componen de planos horizontales planos mínimos unidos a una pared – un diseño simple que no pretende llamar la atención. Por lo tanto, la gente no tiende a pensar en ideas de estanterías más allá del almacenamiento y, en ese sentido, a menudo se pasan por alto las innumerables posibilidades de diseño que ofrecen.
Los estantes ciertamente no tienen que ser aburridos. Al contrario, son uno de los elementos más interesantes, funcionales y versátiles que pueden marcar la diferencia en cualquier interior. A medida que el diseño continúa evolucionando de la mano de nuevas tecnologías y métodos de fabricación avanzados, estos vienen en varios tamaños, materiales y formas –incluso los más complejos y poco convencionales. Por lo tanto, los sistemas de estanterías pueden adoptar una variedad de usos que van desde la división sutil de espacios hasta la duplicación como piezas llamativas que mejoran la estética de una habitación. Todo lo que se necesita es un poco de ingenio para que transformen los interiores, ya sea combinándose a la perfección con un estilo arquitectónico particular o destacándose y causando una fuerte impresión. Para inspirarte, este artículo explora formas únicas de utilizar estantes como elementos de diseño, presentando ejemplos del catálogo de Architonic.
Tipos de estantes y materiales
Antes de profundizar en sus posibilidades arquitectónicas, es importante conocer los diferentes tipos de estanterías disponibles en el mercado. Después de todo, su formato definirá en gran medida el efecto que tendrán en un espacio. Los estantes de pared suspendidos y flotantes, por ejemplo, son muy utilizados debido a su simplicidad y versatilidad. Mientras que el primero se fija a la pared con escuadras fijas, el segundo oculta el equipo de fijación de forma que evita cualquier apoyo visible. De manera similar, los estantes colgantes están suspendidos de cuerdas, tuberías u otras formas de soporte. Los estantes incorporados, por otro lado, se montan en la pared en un rincón o muesca, utilizando la superficie existente de la alcoba como soporte. Como sugiere su nombre, los estantes independientes no se adhieren a las paredes, por lo que se apoyan en ellas o simplemente se mantienen libres en el suelo. También pueden ser apilables, plegables o modulares.
En cuanto a los materiales, hay prácticamente un sinfín de opciones y combinaciones entre las que elegir. La madera –tanto maciza como contrachapada– es por lejos la más demandada por su durabilidad y versatilidad, así como por su aspecto cálido, elegante y atemporal. Especialmente indicados para cargas pesadas, el acero y el aluminio destacan por su resistencia y su elegante aspecto contemporáneo, ideal para un estilo industrial.
Los sistemas de estanterías de plástico también pueden ser bastante resistentes y tener una larga vida útil, pero debido a que trabajan con cargas más livianas, es común encontrarlas en formatos más pequeños (especialmente en habitaciones infantiles). Con diferentes niveles de transparencia con un efecto visual único, los estantes de vidrio son una vista común en los ambientes contemporáneos, aunque generalmente no son tan resistentes como otros materiales. Los estantes de vidrio templado, sin embargo, pueden ser tan resistentes como los de madera dura.
Una vez que se define el tipo de estantería deseado, es posible experimentar con formas, diseños y colores para crear varios efectos arquitectónicos. De esta forma, lo que antes era una pieza horizontal destinada exclusivamente al almacenaje se convierte en un elemento de diseño versátil y multifuncional. Sigue leyendo para descubrir algunas opciones a través de una selección de la sección 'Estanterías' de Architonic.
Dividir sutilmente una habitación
Fijos o móviles, los estantes pueden funcionar como particiones para dividir habitaciones sin comprometer el acceso visual. Por ejemplo, para crear un despacho o zona de estudio separada del resto del salón manteniendo la sensación de un espacio abierto y unificado. Esto permite que la luz y el aire fluyan y también sirve como un punto visible para cualquier elemento ornamental, combinando el almacenamiento, la separación y la decoración. El estante no tiene que llegar al techo para lograr este efecto; en cambio, simplemente debe ubicarse donde sea necesaria una división sutil. Y, por supuesto, cuanto más alto, más largo o más cerrado sea, mayor será el grado de privacidad.
Experimenta con la modularidad
La estantería modular aporta la máxima flexibilidad para adaptarse a diferentes necesidades. Con arreglos prácticamente infinitos que se desarmarán, armarán y reconfigurarán fácilmente, es posible cambiar los diseños de las habitaciones y crear formas y patrones de color únicos. Todo lo que se necesita es agregar o eliminar módulos para satisfacer las necesidades en constante cambio; una estantería, por ejemplo, puede transformarse fácilmente en un escritorio o en un área para sentarse simplemente reorganizando las unidades. La tipología es especialmente adecuada para viviendas modernas e híbridas que exigen adaptabilidad, especialmente en zonas comunes de estar, espacios de oficina y dormitorios.
Completar y llenar la pared
Las estanterías de pared a pared y del piso al techo pueden transformar una superficie blanca, lisa y plana en una característica de diseño llamativa. Además de completar el espacio (y crear un espacio extra útil), pueden llenar la pared con patrones, texturas, colores, plantas y piezas decorativas que agregan carácter y valor estético a la habitación. Estos estantes pueden hacer que cualquier habitación se vea organizada, integrando y agrupando televisores, cuadros y fotografías en un práctico sistema de cuadrícula.
Estante para colgar en el techo
Realzar una superficie en blanco
Crear una obra de arte escultural
Siempre que cumplan con los requisitos necesarios de almacenamiento y exhibición, la versatilidad de los estantes les permite adoptar formas llamativas que funcionan como piezas de arte por sí mismas. Ya sea a través de diseños complejos, geometrías no convencionales, exploraciones de materiales, sombras o texturas, pueden actuar como arte de pared intrincado o piezas escultóricas, decorando un espacio mientras crean un impacto dramático que llama la atención al instante.
Escultura inspirada en la naturaleza
Líneas arquitectónicas limpias
Para obtener más ideas creativas sobre estanterías, visita la Sección 'Estanterías' de Architonic.