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Arquitectos: JAO Arquitectura
- Área: 418 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Javier Callejas
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Proveedores: Porcelanosa Grupo, Domporte, GMetal, Quijada, Technal
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La “Casa Introvertida” es una vivienda unifamiliar que mira hacia dentro, buscando el lugar de recreo y descanso en el espacio que ´recoge´, desinteresada por la realidad que le rodea. De esta forma se abre a un patio enclaustrado, genera miradas lejanas y enmarcadas a la sierra de Tejeda.
Es una casa compleja, que se sitúa fuera de los estándares de mercado, con unos exigentes requerimientos programáticos y un alto grado tanto de tecnificación de las instalaciones, como en su aislamiento acústico.
La fachada es rotunda y ajena. Esta se materializa con un estudiado despiece de grandes paneles de hormigón prefabricado con terminación en dos texturas: una textura “rasgada”, en planta baja y sótano, perteneciente a la tierra, que genera vibraciones rítmicas de luces y sombras. En planta primera, una textura lisa perteneciente al cielo, que refleja la luz del sol. La percepción de estas dos texturas va cambiando en el recorrido alrededor de la casa. Así, en los patios ingleses la parte texturizada coge gran dimensión, hundiéndose en ella, mientras que la textura lisa coge su máxima magnitud en su encuentro con la calle principal, donde la vivienda alcanza su mayor altura.
Esta es una fachada cerrada a la calle, ciega, masiva, que se enrosca sobre sí misma y que se abre en el patio que ella misma forma. Las aperturas en esa fachada se crean con huecos enmarcados con cajones metálicos de aluminio lacado en blanco, huecos en la masividad de la fachada, que enfatizan las vistas que se producen en la casa.
La casa introvertida es también una casa patio. En este caso, un patio interior enclaustrado que es abrazado por la vivienda, como el elemento principal, alrededor del cual se organiza y se abre a la luz del sur. El volumen de la fachada principal (a oeste) se eleva dos alturas sobre la cota de calle, para posteriormente inclinarse (hacia el este) convirtiéndose en un volumen de una altura, una pérgola, un muro y finalmente diluido en una cancela. De esta forma se crea este vacío interior (patio) completamente acotado y “protegido”, a través de este gesto de abrazo que recoge el espacio.
Bajo rasante, estancias de ocio, espacio hedonista en relación a los sentidos. Sótano de gran altura que busca la luz alta de las ventanas y patios ingleses. En esta planta se ubica una zona en relación al agua y otra en relación a la vista y el oído. La zona de agua se interpreta como espacio escavado en el terreno, como cueva de cantera. La zona en relación a la vista y al oído se trata de una sala audiovisual de unas dimensiones concretas. Sala altamente tecnificada, una caja negra.
Sobre rasante, las estancias domésticas de la vivienda, alrededor del patio y abriéndose a él, se organizan los distintos espacios. Como zona principal, el salón-comedor, espacio en doble altura bajo la inclinación de la cubierta, donde se establecen diversas relaciones espaciales, y donde surge el elemento escultórico que cose verticalmente la casa: la escalera.
Escalera como escultura dentro del gran espacio con doble altura inclinado del salón. La idea de una escalera exenta que se enrosca y sube, emergente del suelo. Y se enrosca y baja, excavando en el terreno, dejando un hueco vacío donde se cuela la luz vertical. La materialidad sigue esta misma idea, un elemento metálico que emerge y se eleva, y su negativo excavado, realizado en hormigón. La huella de toda la escalera es de roble, material que enlaza al hormigón y el acero, dándole la idea de un elemento único.