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Arquitectos: Alsar Atelier, César Salomón, Oscar Zamora, SCA
- Área: 25 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Alejandro Saldarriaga
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Proveedores: Matecsa
Descripción enviada por el equipo del proyecto. En el barrio informal de San Luis, ha surgido un proyecto construido por la comunidad, que muestra el poder de la colaboración y la innovación. El proyecto es un prototipo habitable diseñado para recolectar agua de niebla y promover prácticas de agricultura urbana en entornos informales de Colombia. El proyecto fue posible gracias al esfuerzo colaborativo de Alsar-Atelier, Oscar Zamora, César Salomón, la Sociedad Colombiana de Arquitectos y la participación de miembros de la comunidad local.
El proyecto fue iniciado por César Salomón, líder de "Maya Tejedores de la Tierra", y Alejandro Saldarriaga quienes organizaron la donación de un prototipo que podía recolectar agua de niebla a Edison Plazas, residente del Barrio San Luis, que carecía de acceso al sistema de acueducto local. La idea echó raíces y los miembros de la comunidad y el equipo de diseñadores se unieron para hacer realidad el prototipo.
Una característica destacada de este proyecto es su posición crítica frente a los métodos de construcción tradicionales en barrios informales. De hecho, introduce marcos de acero liviano como material de construcción alternativo para el entorno de autoconstrucción, promoviendo prácticas de construcción sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Este innovador proceso de construcción desafía la forma tradicional de construir viviendas en barrios autoconstruidos y no requiere conocimientos constructivos para su ensamblaje. Al utilizar este enfoque, el proyecto tiene como objetivo crear un modelo sostenible de construcción que pueda replicarse en otros barrios informales y reemplazar el uso de ladrillo y concreto.
La construcción del prototipo fue llevada a cabo por cuatro miembros de la comunidad: César Salomón, Edison Plazas, Nelson Gómez y Diego Reyran. Estas personas pudieron llevar a cabo la construcción del prototipo sin utilizar maquinaria pesada ni concreto, lo que demuestra la accesibilidad del proyecto. Al utilizar una tela blanca (polisoimbra) en la fachada del prototipo, el agua presente en la niebla puede condensarse y luego recolectarse con un sistema de tubos de PVC colocados en la parte inferior del prototipo.
El agua recolectada se utiliza para fines domésticos, como la limpieza y el lavado, lo que reduce la dependencia de la comunidad de las fuentes de agua municipales. El agua también se utiliza para el riego en el invernadero, promoviendo la agricultura urbana y creando un microclima ideal para el crecimiento de las plantas.
Este prototipo construido por la comunidad se ha convertido en un hito en el barrio de San Luis, empoderando a los miembros de la comunidad local y dando visibilidad a los participantes del proyecto. El proyecto también ha brindado la oportunidad a la comunidad local de aprender nuevas técnicas de construcción que promueven la sostenibilidad. Este prototipo sirve como ejemplo de resiliencia dentro del entorno construido por sí mismo, demostrando que los métodos innovadores y sostenibles de construcción son posibles incluso en condiciones desafiantes.
Además, el proyecto ha generado cambios positivos en el barrio de San Luis. Al promover la agricultura urbana y reducir la dependencia de las fuentes de agua municipales, el proyecto ha ayudado a mejorar la seguridad alimentaria y el acceso a agua limpia. Además, el proyecto ha inspirado a otros miembros de la comunidad a tomar medidas y encontrar soluciones innovadoras para abordar los desafíos que enfrenta la comunidad.
En conclusión, el proyecto construido por la comunidad de San Luis demuestra el poder de la colaboración, la innovación y la sostenibilidad. Al introducir estructuras de acero liviano y tela blanca para recolectar agua y promover la agricultura urbana, este proyecto desafía los métodos de construcción tradicionales y crea un modelo sostenible que podría replicarse en todo el mundo. Además, destaca el potencial del entorno construido por la propia comunidad y proporciona un ejemplo de resiliencia e ingenio dentro de la comunidad. El proyecto no solo ha empoderado a los miembros de la comunidad local, sino que también ha inspirado cambios positivos en el barrio de San Luis, convirtiéndolo en un modelo para otros barrios informales de todo el mundo.
