Aumentar la seguridad en las calles con la ejecución de un diseño urbano que priorice a los peatones y ciclistas es lo que Nueva York está realizando desde que en el año 2000 adoptó el plan Visión Cero. Éste programa de origen sueco no solo consiste en reducir las muertes de tránsito, sino que en llevarlas a cero, como dice su nombre.
El principal foco de esta iniciativa es hacer que las calles sean lugares más seguros para todos los usuarios del espacio vial, debido a que fue creado bajo la premisa que“ninguna muerte es moralmente aceptable”, según dice uno de sus promotores, Hans Berg, quien fue miembro del Departamento Nacional de Transportes de Suecia.