La creciente pandemia mundial de coronavirus dejará profundas huellas en la sociedad, tanto en la forma como las personas se relacionan entre sí como con los espacios públicos. En un intento por reducir la tasa de transmisión de la enfermedad, los gobiernos y las autoridades de todo el mundo han ordenado a las personas que se queden en casa, en la seguridad e higiene del entorno doméstico, y que eviten cualquier contacto innecesario con otros espacios, objetos y personas.
Para los profesionales de la arquitectura y la construcción civil, pasar todo el día en casa haciendo "home office" puede ser un desafío, especialmente cuando parte de las tareas cotidianas consiste en visitar obras, discutir colectivamente y en última instancia relacionarse con las personas, desde clientes hasta proveedores de materiales. Por lo tanto, nos gustaría saber más sobre los desafíos y las oportunidades que el período de cuarentena está colocando frente a la práctica arquitectónica.