A simple vista, un parque sin rejas puede ser percibido como un espacio más acogedor y fácil de visitar. Además, como está disponible durante las 24 horas, puede ser un lugar que los ciudadanos integren en sus trayectos, mejorando así la conectividad entre los barrios.
Precisamente, tomando estas ideas como objetivos, el Departamento de Parques de Nueva York lanzó el programa “Parques sin Fronteras”, una iniciativa que, como dice su nombre, busca que estos espacios públicos sean más accesibles para los habitantes y que sean considerados como lugares más bonitos y lugares de encuentro atractivos.