En una capital cultural como Berlín, donde tiendas pop-up aparecen en almacenes abandonados y los club nocturnos lanzan fiestas en centrales eléctricas, resulta razonable que una galería de arte pueda encontrar su hogar en una mole de hormigón casi indestructible. Tal es el caso del 'Berlin Bunker' en el corazón de Mitte, el distrito de moda en la capital alemana.
Monolítico y simétrico, decorado sólo por franjas de ventanas verticales en sus cuatro fachadas idénticas, este ex refugio antiaéreo resiste como una reliquia del doloroso pasado de Alemania. Sin embargo, si nos acercamos, se revela algo inesperado: un lujoso ático rodeado de jardines exuberantes, un proyecto finalizado en 2007. Ésta es la casa de Christian Boros, el coleccionista de arte cuya colección privada está almacenada y exhibida en las profundidades del búnker.