Para desarrollar materiales que satisfagan las necesidades del futuro, es importante considerar los retos del pasado y presente. El concreto, un material de construcción ampliamente utilizado, ha mantenido su composición básica desde su concepción moderna en el siglo XIX con la invención del cemento Portland por Joseph Aspdin. El concreto es un material altamente valorado por su resistencia y cohesión, convirtiéndose en uno de los materiales más utilizados en el mundo. Gracias a sus características técnicas y estéticas, arquitectos han erigido obras como el edificio de CEPAL y la capilla de Palmira, las cuales se han convertido en hitos de la producción arquitectónica actual. Pero en la actualidad, características como estas ya no son el único criterio para ponderar el valor de un material, dada la creciente necesidad de crear materiales con un enfoque sostenible. En el caso de la industria del concreto, ésta emite una alta cantidad de contaminantes a la atmósfera, representando alrededor del 8% de las emisiones globales de CO₂.
calidad del aire: Las más recientes noticias y obras de arquitectura
¿Qué materiales pueden promover la salud en la arquitectura de interiores?
Estadísticas recientes sugieren que si alguien vive hasta los 80 años, alrededor de 72 de esos años los pasará dentro de edificios. Esto tiene sentido si tenemos en cuenta que, cuando no están en casa, los humanos están trabajando, aprendiendo o participando en actividades divertidas principalmente en entornos cerrados y construidos. Sin embargo, considerando los eventos actuales, se espera que este número crezca. En un mundo cada vez más caótico e incierto, marcado por los efectos continuos del cambio climático y la pandemia mundial, el deseo de permanecer en casa en un entorno protegido, controlado y pacífico es más fuerte que nunca. Los arquitectos enfrentan un desafío importante: crear interiores cómodos, productivos y saludables con parámetros bien regulados, considerando factores como la calidad del aire interior, la iluminación natural y las características biofílicas desde las etapas iniciales del diseño. Por supuesto, esto implica elegir los materiales con sensibilidad y en consecuencia, ya sea evitando ciertos componentes nocivos para la salud o integrando productos no tóxicos que alivian y promueven el bienestar.
La importancia de diseñar contemplando una buena calidad de aire interior
Los seres humanos pueden sobrevivir hasta 30 días sin comer y 3 días sin beber pero sólo 3 minutos sin respirar. Nuestra necesidad de aire también es constante, confiamos en él en todo momento en interiores y exteriores, aunque a menudo puede ser menos limpio de lo que esperamos. Los olores desagradables nos hacen conscientes de la mala calidad del aire, pero muchos agentes irritantes y gases no saludables no son detectables por el olfato y, al mismo tiempo, afectan nuestra salud.
Diseñar un interior con condiciones ambientales óptimas es también responsabilidad del arquitecto. A continuación te explicamos algunos principios sobre la calidad del aire en espacios interiores y cómo nuestro rol como arquitectos es determinante en un buen diseño para espacios saludables.