El hormigón pigmentado surge a partir de la adición de pigmentos que proporcionan un color específico al hormigón tradicional. Desde toques sutiles hasta colores más intensos, esta estrategia permite a la arquitectura jugar con superficies y estructuras en una amplia gama de tonalidades y acabados. A diferencia de recubrimientos superficiales, el hormigón pigmentado se integra directamente en la composición de la mezcla, lo que evita que se desvanezca o desgaste con el tiempo. A través de sus múltiples posibilidades estéticas, el hormigón pigmentado es una alternativa versátil y atractiva para agregar color en la arquitectura y diseño.
¿Cómo aplicar este material en la arquitectura? Para lograr condiciones óptimas y duraderas con el hormigón pigmentado de Melón Hormigones, es fundamental seguir correctamente su proceso de aplicación, ya sea en muros, pisos interiores, pavimentos exteriores, esculturas o mobiliario urbano. A continuación, compartimos una serie de recomendaciones clave para el correcto uso del hormigón pigmentado, desde la selección del producto hasta los cuidados posteriores a la aplicación.