Aunque Zaha Hadid comenzó su notable carrera arquitectónica a finales de la década de 1970, no sería hasta 1990 que sus trabajos traspasarían el formato de dibujo y pintura para ser materializados físicamente. La estación de bomberos de Vitra, diseñada para el complejo industrial con el mismo nombre en Weil-am-Rhein, Alemania, fue uno de los primeros proyectos de diseño arquitectónico de Hadid que efectivamente se construyó. Los planos de hormigón que se entrecruzan oblicuamente en el edificio, que sirven para dar forma y definir la calle que atraviesa el complejo, representan el primer intento de traducción de los fantásticos y poderosos dibujos conceptuales de Hadid a un espacio arquitectónico funcional.