Tras la selección de México como sede olímpica, durante la 60ª Sesión del Comité Olímpico Internacional para los Juegos Olímpicos de 1968, Estados Unidos, Argentina y Francia se descartaron como anfitriones del evento. Generando especulaciones y con un presupuesto limitado, por primera vez un país de Latinoamérica había quedado seleccionado como sede anfitrión; y con esto, la promesa y desarrollo de una infraestructura de calidad urbana y arquitectónica era evidente.
Edificadas y renovadas para dar servicio a los Juegos Olímpicos de México 1968, las obras sede de actividades deportivas y culturalesnmarcan una identidad particular en el trazo urbano de México, mostrando su historia a casi 50 años de uno de los eventos internacionales más importantes para el país.
Conoce la historia de las obras construidas para la Olimpiada ‘México 68’ y su estado actual, después del salto.