En su nuevo libro Landscape as Urbanism, Charles Waldheim, el John E. Irving Professor y Director del Programa de Landscape Architecture de la Escuela de Diseño de Harvard University, sostiene que - con el fin de comprender la metrópolis del siglo 21 - "un conocimiento tradicional de la ciudad como una extrapolación de modelos arquitectónicos y metáforas ya no es viable dado la prevalencia de fuerzas y flujos más grandes. Estas incluyen rupturas y grietas en la lógica arquitectónica de la forma urbana tradicional, debido a los cambios ecológicos, económicos o infraestructurales".
En este sentido, las construcciones espaciales en entornos urbanos ya no deben asociarse a funciones insolubles o a partir del aislamiento, sino que deben integrarse al tejido de la ciudad. Este tipo de proyectos deben ser flexibles a los inevitables cambios en su funcionalidad y a elementos que son subproductos del cambio económico y las evoluciones en los intereses de los usos de suelo. La docena de proyectos destacados aquí son ejemplos de tales prácticas, tanto en cómo se adaptan a intervenciones anteriores y en cómo se proyectan más allá de la noción de un futuro estático para condiciones urbanas que en realidad están perpetuamente en proceso de cambio.