Es polémico cuán crucial es el patrimonio para la valorización turística y comercial de ciudades como Cartagena. Al valorizarse, el sector inmobiliario invierte más y más en edificios que contrastan con el paisaje urbano histórico, y sobre todo al ser una ciudad costera, caribeña, cálida y vacacional, se toman como referentes ciudades de desarrollo en altura masivos como Miami. ¿Hasta donde llega la ambición de la construcción?.
La respuesta probablemente es hasta que los intereses de la ciudad a largo plazo sobre pasen los de los desarrolladores particulares. Así es el caso del polémico edificio Aquarela al cual fue cesada su construcción ya avanzada tras el pronunciamiento de UNESCO que retirarían a la ciudad amurallada de Cartagena del listado de Patrimonio de la Humanidad. Por esta razón el alcalde de Cartagena recalcó su motivación para derribar la estructura que quedó en construcción.