Cuando hablamos de Le Corbusier, parte de su obra, sobre todo las primeras villas en las que estuvo trabajando de la mano conjunta de Pierre Jeanneret, queda apodada bajo el nombre de “Villas Blancas”. Es curioso que este color, el blanco, quede asociado al nombre del arquitecto; y no posea, como ocurre en el caso de algunos pintores, una etapa “azul” como Picasso o una etapa “oro” como Klint.
¿Cuándo, y por qué, fue acuñado dicho término de “Villas Blancas” de Le Corbusier? ¿Es acaso posible que la blancura de sus edificios haya sido malinterpretada, como ocurre con el arte griego? Una idea, dicha blancura, muy útil para cimentar las bases del neoclasicismo en su época, pero totalmente alejada del abanico de colores con los que gozaban dichas obras en el periodo helénico.
En 2011 se presentó a la UNESCO un plan de mejora del Centro Histórico de la Ciudad de México para los años 2011-2016. El proyecto se propuso como un plan conjunto entre sociedad civil, inversión privada y gobierno, esto supuso la mejora de gran parte del centro histórico y la recuperación social y material de muchos de los inmuebles del barrio.
El legado arquitectónico de la Ciudad de México se extiende más allá del Centro Histórico y aunque el plan inicial beneficio enormemente esta zona, son muchos los edificios todavía sin intervenir dentro y fuera de la Colonia Centro. Tras el sismo que sacudió México en 2017 los edificios que resultaron dañados pasaron a engrosar la lista de aquellos que ya estaban en desuso, abandono o en elevado estado de degradación y que se distribuyen por toda la Ciudad de México.
De todos ellos, nos gustaría destacar aquellos en los que su rehabilitación y posterior reutilización generarían un mayor impacto en el área dónde se encuentran con base a su valor simbólico, arquitectónico y material.
Cuando se proyecta un edificio, un pensamiento recurrente suele ser el de cuánto durará en el tiempo. Y es que una vez el edificio finaliza su construcción y abre sus puertas al usuario, comienza su etapa de vida útil, y poco a poco irá construyendo su legado. Entra en juego entonces la cuestión de cómo será recordado, de cuál será la huella de este edificio en nuestros recuerdos: memoria arquitectónica. Y al igual que la memoria humana, la arquitectónica es caprichosa. Los edificios se olvidan como se olvidan recuerdos.
La arquitectura madrileña hace un buen uso del recuerdo. Estilos propios de su arquitectura más histórica siguen hoy en pie y en pleno uso de sus facultades. El neomudéjar, por ejemplo; llegó para quedarse a finales del siglo XIX, y a día de hoy son muchos los ejemplos latentes que siguen siendo epicentros de la ciudad, albergando usos como hospitales, universidades, colegios, asilos, centros culturales o museos.
La modernización de Bogotá entre 1940 y 1970 captada en reportajes fotográficos urbanos y arquitectónicos, ha sido consignada en diversos libros, revistas y fotolibros de la época, así como también en imágenes de archivos públicos y privados de la ciudad. Todas estas tomas revelan una aproximación intencionada, e incluso crítica, de cómo la arquitectura moderna reconfiguró los centros de las ciudades y puso en relación los nuevos edificios y espacios urbanos con el paisaje urbano existente.
Cuando se trata de analizar el impacto del reporte gráfico, es necesario hablar de Sady González, Manuel H. y Daniel Rodríguez. La arquitectura y la ciudad son el fondo de las escenas de vida urbana, personajes, acontecimientos y actividades cotidianas, y sus fotografías son un testimonio gráfico imprescindible para comprender la transformación de la ciudad y su contexto histórico.
La arquitectura del paisaje es responsable de la transformación y resignificación del paisaje, ya sea mediante el enriquecimiento de la arquitectura o al traer a la luz la historia del sitio. Al igual que con los edificios, cuando diseñamos con vegetación, nos permite trabajar una serie de estímulos, cualidades y funciones.
El 22 de noviembre de 1988 representa una fecha muy marcada dentro del ámbito arquitectónico pues fue cuando, uno de los arquitectos más importantes para la historia de la arquitectura mexicana y del mundo, falleció en la Ciudad de México. Luis Barragán Morfín, nacido en Guadalajara y graduado como ingeniero civil dejó un extenso legado traducido en textos, conferencias, edificios, casas, jardines que siguen vigentes hasta nuestros días, mismos que se retomaron por algunos de los arquitectos más influyentes de la escena internacional. El trabajo de Luis Barragán, representa años de investigación, pero sobre todo de contemplación, de ver el mundo con sensibilidad y de seguir re-escribiendo lo que nos parecería evidente.
Indudablemente, el legado de Luis Barragán representa algo tan complejo y atemporal que sigue inspirando y sorprendiendo a los arquitectos de todas las generaciones. Es por eso que, a 31 años de su muerte hemos recopilado los testimoniales de algunos de los arquitectos contemporáneos más representativos basados en México quienes nos compartieron cuál ha sido la obra de Luis Barragán más importante dentro de su labor y por qué. Sigue leyendo para conocer los testimoniales completos.
Todos recordamos cuando en nuestra infancia nos dedicábamos a dibujar una casita con una puerta y una ventana, un techo de dos aguas, y un árbol en el lado. Pero, lo que diferencia a los arquitectos del resto de la población, es que seguimos dibujando esto después de adultos, generalmente con un poco más de técnica. De la misma forma que nuestros dibujos de casas se fueron volviendo más complejos y completos, los dibujos de la vegetación necesitaron también mejorar un poco. (Esa forma parecida a un brocólis no agradaría a muchos clientes y profesores). Aunque generalmente los árboles no son los focos principales de los dibujos, desempeñan un papel importante en la composición de los croquis, principalmente para representar la escala, sombreado o alguna intención de paisajismo.
En el contexto de la Semana UTEM 2018 en Chile, el workshopInfraestructuras en Obsolescencia (WIO) reunió a 21 equipos de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM), quienes desarrollaron propuestas para intervenir 7 estructuras en obsolescencia en Santiago, desde un puente peatonal actualmente cerrado hasta una deteriorada estación de trenes.
Con la presencia internacional de los arquitectos Luis Tombé (Colectivo720, Colombia) y Walter Leone (Leone Arquitectura, Venezuela) —quienes además participaron del ciclo de charlas CONTRAPOSICIONES y dictaron charlas magistrales en el Colegio de Arquitectos de Chile—, cada equipo estuvo conformado por 7 integrantes de diferentes años de la carrera, acompañados por dos tutores quienes guiaron los proyectos.
En 1988, cuando Luis Barragán muere, se comienza un proceso para gestionar los bienes que heredó a un grupo de arquitectos que radicaban en Guadalajara, Jalisco. A partir de este momento nace la Fundación de Arquitectura Tapatía Luis Barragán con la intención de resguardar un porcentaje de sus bienes inmuebles, su biblioteca y ciertos bienes personales por lo que en ese momento, la fundación consiguió los fondos para recuperar la Casa-Estudio Luis Barragán y conservarla como lo que es ahora, una casa-museo.
En esta ocasión, conversamos con el arquitecto Salvador Macías, co-fundador de Estudio Macías Peredo quien ahora dirige este espacio que busca dotar de un espacio público para la reflexión y divulgación de la arquitectura.
Dedicado a las familias afectadas por los desastres naturales y a aquellas que habitan en zonas de laderas a la espera de alternativas o cambios en su hábitat.
Las laderas son como un manto que nos rodea, pero de una forma sesgada. La neblina limeña excusa a ese olvido. Hablar de habitar las laderas puede ser todavía sinónimo de no-habitable por las malas condiciones en que se encuentran tantas viviendas vulnerables pertenecientes al 70% de autoconstrucción en la ciudad. Sin embargo, las laderas, por su condición geográfica ofrecen cualidades habitables que hay que re-conocer y re-pensar para poder emplazarnos con sabiduría en el territorio, y así re-habitar con nuevos aires. No todas las viviendas autoconstruidas son “sin conocimiento”, algunas de ellas tienen lecciones propias. Otras, en su mayoría, no. La verdad es que es un terreno aún por seguir explorando.
El miércoles 21 de noviembre se realizó la lectura del veredicto del Concurso de la XXI Bienal Panamericana de Arquitectura de Quito - BAQ 2018.
Separados en 6 categorías de participación, los diferentes jurados seleccionaron una serie de proyectos y publicaciones que se destacan por ser un aporte real en sus respectivos ámbitos, entregando lecciones pertinentes para nuestra disciplina.
A continuación, presentamos los ganadores en las Categorías (E) Teoría, Historia y Crítica de la Arquitectura, el Urbanismo y el Paisaje y (F) Publicaciones Periódicas Especializadas.
Bogotá ha sido bien conocida por contar con diversas plazas de mercado, las cuales acogen no solo la venta de productos de origen animal, granos, frutas, y verduras, sino que adicionalmente su espacio es una representación de la cultura colombiana.
Se tratan de asentamientos tradicionales cuyo crecimiento se ha incrementado conforme al aumento de la población, sufriendo así transformaciones a nivel espacial. Para los locales representa el lugar para mercar y para los turistas un atractivo turístico donde tienen la oportunidad de degustar la amplia oferta de sabores, olores y texturas propias de Colombia.
A los 62 años de edad, en 1964, el arquitecto mexicano Luis Barragán comienza el proyecto de una de sus obras más representativas: la Fuente de los Amantes, ubicada dentro del Fraccionamiento Los Clubes, en el municipio de Atizapán, Estado de México.
Esta obra se enmarca dentro de una intervención mayor, asociada dentro del mismo proyecto a la Cuadra San Cristóbal (caballerizas) y a la Casa Egerstrom, pensadas por el arquitecto para una comunidad de caballistas. El conjunto, terminado en 1969, se transformó en un símbolo de su obra por el impecable uso del agua, la abstracción geométrica de los distintos planos, y el uso del color, elementos recurrentes en su carrera.
La domótica es un conjunto de tecnologías aplicadas al control y la automatización inteligente de una obra de arquitectura. Sus diferentes sistemas permiten una gestión eficiente del consumo energético, la seguridad, la accesibilidad, y el confort general del edificio, convirtiéndose en un tema importante a considerar a la hora de proyectar, construir y habitar.
Los sistemas domóticos se basan en la recolección de datos mediante sensores, los que luego son procesados para emitir órdenes precisas a los ejecutadores, variando la calidad ambiental de cada recinto según las necesidades del usuario. El ritmo de vida actual y los avances tecnológicos que hemos experimentado en los últimos años han provocado nuevas formas de vivir, motivando el diseño de hogares y edificios más humanos, polifuncionales y flexibles.
Este artículo recoge distintos referentes de vivienda donde se ha utilizado la domótica, la cual ha dejado de ser un lujo para convertirse en una solución factible y efectiva para todo tipo de proyecto.
https://www.archdaily.co/co/906269/casas-inteligentes-que-utilizan-domotica-para-mejorar-la-calidad-de-vida-de-sus-habitantesMartita Vial della Maggiora
Los grandes nombres de la arquitectura colombiana en el siglo XX se destacaron por un genuino interés en el ladrillo. Al punto que hoy sus principales ciudades están marcadas por el uso del ladrillo en sus principales barrios.
Una vez que sales de la universidad es común cierta rara sensación entre los arquitectos: no sabes qué sabes. ¿Diseñar? No tanto. ¿Detalles técnicos? Necesitas especialistas. ¿Puedes construir desde cero? No, aún no, te falta práctica. Entonces, ¿qué sabemos realmente?
https://www.archdaily.co/co/906023/para-que-son-buenos-los-arquitectosArchDaily Team
La mayoría de los arquitectos suelen empezar la explicación de sus proyectos señalando el lugar por el que se entra en ellos. "Se entra por aquí", suelen decir. Como si antes de entrar no hubiera sucedido nada o no existiese nada. Como si la vida del usuario, o la del propio edificio, comenzaran en aquel lugar que muchos piensan que separa el exterior del interior. Una extraña concepción del tiempo.
Enric Miralles hacía un apunte interesante acerca de eso: no se trata de entrar, sino de acceder; algo que después también será marginado. Debemos suponer que en arquitectura, acceder quiere decir: «entrar en un lugar o pasar a él», como el diccionario explica. Pero también encontramos otras interpretaciones más interesantes como «tener acceso a una situación, condición o grado superiores; llegar a alcanzarlo», que hacen que el acto de acceder se revista de significados y de tiempo.
Existen muchas maneras de resolver el confort acústico de los espacios interiores que diseñamos, utilizando materiales y soluciones de distintos precios y apariencias. Las planchas perforadas de yeso cartón son una opción económica y eficiente para incorporar en nuestros proyectos, absorbiendoel sonido y reducir el nivel de ruido generado por la reverberación a través de diversos patrones y formas.
Aplicadas principalmente en colegios, oficinas, centros comerciales, restaurantes, lobbies, y hospitales, las planchas de yeso cartón son fáciles de instalar y pueden entregar resultados estéticos de alta calidad, en cielos y revestimientos.
El hormigón tal vez sea el material más fácilmente asociado a la arquitectura moderna brasileña; de alta resistencia a la compresión y capaz de asumir variadas formas, su plasticidad hizo que se convirtiera en el material favorito de algunos de los más expresivos arquitectos brasileños del siglo pasado.
Hoy en día, todavía está siendo explorado en la arquitectura producida en Brasil, sea por su robustez estructural, facilidad de mantenimiento o valor estético.
Hemos conversado con la arquitecta Mayerlly Cuta, quien junto con el arquitecto y artista plástico Carlos Alberto Hernández, fundaron Urban Sketchers Bogotá; un movimiento mundial de dibujo promovido a partir de la práctica de dibujar en las calles bogotanas y el cual por medio de salidas gratuitas y abiertas a cualquier público motiva a los artistas a capturar en tiempo real trazos sobre lo que está alrededor.
Desde el 24 de Octubre hasta el 9 de Noviembre, se llevó a cabo una exposición en homenaje al arquitecto Rogelio Salmona. Según Mayerlly, la idea surgió después de una de las salidas en donde se encontraban tomando café, cuando manifestaron la intención de conmemorar los 11 años desde su fallecimiento dibujando sus obras presentes en la ciudad de Bogotá. “Como gestores empezamos a dibujar y a promover las salidas y empezaron a llegar las oportunidades de convertir los trabajos en exposición, La Sociedad Colombiana de Arquitectos y la Fundación Rogelio Salmona se unieron al proyecto y este convergió con las actividades del mes de octubre de estas entidades, llevando a cabo la convocatoria de “Dibujando a Salmona”. Esta convocatoria reunió a más de 100 personas y se recogieron más de 300 dibujos que llegaron desde diferentes ciudades del país y del mundo.
Actualmente en la industria de la construcción existen cada vez más exigencias por proyectos amigables con el medio ambiente, como certificaciones de construcción sustentable y eficiencia energética. Por esta razón es necesario tomar conciencia del valor ecológico de la madera como sustituto renovable de otros materiales más intensivos en uso de energía y causantes de altas emisiones de CO2.
La arquitectura es poderosa, y como la energía nuclear, depende de como se utilice. Puede crear ciudades inhabitables, también puede crear ciudades más seguras y mejorar nuestra calidad de vida.
En diversos ejemplos, el diseño urbano ha brindando una respuesta a los espacios públicos deteriorados o abandonados, que no solo evidencia que la distribución e iluminación es imprescindible, sino lo pertinente de considerar a los participantes y generar espacios para el encuentro.
La modernización de Bogotá entre 1940 y 1970 captada en reportajes fotográficos urbanos y arquitectónicos, ha sido consignada en diversos libros, revistas y fotolibros de la época, así como también en imágenes de archivos públicos y privados de la ciudad. Todas estas tomas revelan una aproximación intencionada, e incluso crítica, de cómo la arquitectura moderna reconfiguró los centros de las ciudades y puso en relación los nuevos edificios y espacios urbanos con el paisaje urbano existente.
Cuando se trata de analizar el impacto de la fotografía desde la arquitectura, es necesario hablar de Paul Beer y Germán Téllez. Dentro de su amplio espectro de temas retratados, estos dos fotógrafos se han dedicado de manera más específica a la fotografía de arquitectura. Recibieron encargos de las más prestigiosas firmas de arquitectos de la época y sus tomas muestran valores, relaciones y aspectos diferentes y complementarios de la arquitectura y de la ciudad moderna.